Enfado de los empresarios por el retraso del presidente en comparecer

“Inaceptable”, “desastre de organización”, “desconsideración”, “no tiene excusa”… Los grandes empresarios han desatado una serie de improperios por el tiempo, 45 minutos, que Pedro Sánchez les hizo esperar ante la pantalla a que comenzara la intervención sin causa que lo justificara. En su mayoría, los asistentes consultados ―piden guardar el anonimato porque, si no, no harían comentarios― han expresado una sensación “de falta de respeto", según uno de los consultados, que añade para quitar hierro: "Algo que normalmente les ocurre a los políticos cuando llegan a La Moncloa”.

“No se puede convocar a última hora de un día para la mañana siguiente y luego dejarnos plantados durante casi una hora sin saber qué hacer mientras esperas a que aparezca el presidente y, encima, para no decir gran cosa”, dice otro empresario del Ibex que no oculta su enfado. Esa visión la completa otro ejecutivo: “Somos gente muy disciplinada y si nos convoca el presidente, acudimos respetuosamente como siempre lo hemos hecho; pero, él debe saber que normalmente tenemos una agenda muy apretada y nos no las puede determinar de esta forma”. “Y, además, quiere que escuchemos por la tarde a los cuatro vicepresidentes”, apostilla.

Las críticas van más allá: “¿Qué pinta hacer este acto después del que hizo en la Casa América [el pasado 31 de agosto] para decir prácticamente lo mismo? Podía haber esperado a tener la letra pequeña y los instrumentos para ejecutar de forma rápida y eficiente que va a presentar dentro de 10 días y convocarnos entonces para tener más elementos de juicio”, apunta un financiero que, no obstante, añade que le parece un éxito que España haya conseguido la aportación de 140.000 millones de euros.

La reacción en caliente de los empresarios les ha hecho dejar en segundo plano la valoración del contenido del plan, que para un destacado empresario “es muy ambicioso y crea ilusión, es verdad que falta concretar algunos datos, pero lo cierto es que si se consolida va a resultar muy satisfactorio”. “Es una oportunidad para todos, el sector financiero puede jugar un papel realmente importante en su desarrollo”, afirma un banquero.

“Ha sido un montaje espectacular, con más 150 personas conectadas, no solo empresarios, aunque haya sido para trasladar ideas muy básicas”, apunta otro de los consultados. “En ese sentido”, añade, “nadie puede hablar mal del mensaje, pero de lo que se trata es de la consistencia con que se va a abordar el plan y cómo va a quedar para el futuro, se corre el riesgo de que se administrativice demasiado la ejecución y afecte al futuro de los contratos”.

Otra voz, que destaca que no se ha hablado nada de la unidad de seguimiento ni de quién lo va a llevar, manifiesta que el presidente ha hablado todo el rato de 72.000 millones. “Esto implica”, a su juicio, “que el Gobierno solo va a solicitar la parte de subvención, pero no la de créditos”. De ellos, el 37% será para la transición verde y el 33% para la digital, los dos pilares económicos sobre los que se asienta el plan de recuperación junto a la igualdad de género y la cohesión social. En ese sentido, un banquero apostilla que lo importante es que “los fondos se destinen a resolver los deberes que tiene la política económica y no para tapar los agujeros que tienen las comunidades autónomas y la Administración central; es decir, que sea estructural y no coyuntural”.

Colaboración privada

En todo caso, los empresarios consultados han asegurado que van a respaldar el plan y acudir a la llamada del presidnete. “Es una oportunidad histórica para España, ya que si las ayudas se combinan con reformas estructurales podría corregir deficiencias ancladas en materias como la educación y el empleo”, añade otro, que completa diciendo que será fundamental la colaboración con el sector privado para amplificar el impacto de los fondos, en particular el sector financiero como financiador y canalizador de estos".

En ese punto, varios empresarios han coincidido en que, además de la necesidad de colaboración público-privada, se ha trasladado “un mensaje de esperanza en la capacidad del país para recuperarse y salir de esta crisis”. Otros consultados han destacado que supone la reactivación económica en dos pilares fundamentales, la transición energética y la digitalización, tal como recogen los planes de las empresas del sector energético. “Este plan debe servirnos nos solo para acelerar la salida de la crisis sino también para la transformación de nuestra economía considerando aspectos climáticos, inclusivos, de igualdad, de equidad”, refiere un ejecutivo.

Fuentes de la CEOE han afirmado que, tras escuchar al presidente, la organización continuará su colaboración en la reconstrucción económica y social de España a través de su Oficina de Apoyo para los Proyectos Europeos y la `plataforma www.ceoexeuropa.es creada a tal efecto.

Por su parte, la Cámara de Comercio de España ha comunicado que considera positivas las líneas enunciadas por Sánchez. Para la institución que preside José Luis Bonet destaca que plan “considere a las empresas, generadoras de riqueza y creadoras de empleo, como protagonistas esenciales” y que, entre las 10 políticas tractoras enumeradas por el presidente, sobresalgan las dirigidas a la modernización y digitalización del ecosistema de nuestras empresas. Estas políticas concentrarán el 17 % de los fondos totales, una de las partidas más altas, ante la urgente necesidad de apoyar el tejido empresarial y garantizar la competitividad industrial. A su juicio, estas acciones están en línea con las peticiones del organismo cameral.