Casado apuesta por un acuerdo de reconstrucción en sanidad y la UE presionado por el pacto europeo

El líder del PP, Pablo Casado, ha celebrado este martes el pacto histórico para la reconstrucción tras la pandemia alcanzado la pasada madrugada en Bruselas por unanimidad entre los 27 países socios de la Unión Europea. Casado ha atribuido a los principales líderes del PPE y en concreto a la presidenta de la Comisión, Úrsula von der Leyen, y a la canciller Angela Merkel, ambas alemanas y conservadoras, el mérito del acuerdo. Y luego ha concluido que el mismo es una corrección a las políticas ejecutadas en España por el Gobierno de Pedro Sánchez. Casado ha anunciado, durante un acto en la universidad de verano en El Escorial, que ha dado instrucciones a su grupo en el Congreso para que llegue a un acuerdo antes del pleno de esta tarde sobre la reconstrucción del país pero en los ámbitos de la sanidad pública y la UE. Las negociaciones con el PSOE aún no se han cerrado. El presidente, Pedro Sánchez, ha pedido ya la comparecencia en el Congreso para explicar el pacto europeo.

El éxito final, tras cuatro días y noches de intensas negociaciones en Bruselas, ha presionado a su vez en España a todos los partidos, y en este caso al PP, para avanzar en las negociaciones en marcha en las últimas horas para trasladar ese acuerdo a territorio nacional. Fuentes de La Moncloa, esta misma mañana, han informado de que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, comparecerá próximamente en el Congreso de los Diputados, a petición propia, para informar del Consejo Europeo extraordinario celebrado el 23 de abril, del Consejo Europeo ordinario del 19 de junio y del desarrollado estos días 17,18,19 y 20 de julio.

Casado celebró el pacto en la UE pero sobre todo se mostró muy “satisfecho” porque la posición alcanzada fue presentada en su día por la presidenta de la Comisión y la presidenta de turno de la UE, la alemana Merkel, y porque entiende con ello que el PPE “ha hecho más por España que los socios del PSOE, como se ha visto en estas cuatro jornadas maratonianas de negociaciones”. En ese agradecimiento particular a los dirigentes del PP incluyó a los primeros ministros de países del norte de Europa y a los comisarios de esa formación “que han remado a favor de los intereses de España”.

Casado se mostró preocupado por conocer ahora cómo queda el reparto de los diversos fondos, incluida la PAC (Política Agraria Común), y por cómo se solventa el paso de España de país receptor de dinero a contribuyente neto. El presidente popular valoró mucho también que el acuerdo conlleve “responsabilidad en el uso de los fondos, estabilidad presupuestaria y económica, y reformas estructurales y el mantenimiento de las que ya están funcionando, como la laboral, para la competitividad”.

El líder del PP consideró además que este “buen acuerdo” europeo es “una enmienda a la política del Gobierno de España en cuanto a sus pactos de investidura con Podemos y los más recientes con Bildu y partidos nacionalistas”. Casado avanzó ahí que la “responsabilidad y solidaridad” demostrada en la UE por otras naciones con España debería trasladarse al ámbito nacional para futuros acuerdos y políticas en la misma línea que entonces sí podrían contar con el voto de su formación en las Cortes.

Casado anunció finalmente que ha dado instrucciones a su grupo parlamentario en la comisión de reconstrucción tras la pandemia del coronavirus en el Congreso “para que intenten llegar a un acuerdo en el día de hoy en el dictamen para la política europea y la sanitaria con la esperanza de que el Gobierno acepte nuestra propuesta de un pacto de Estado por la Sanidad, por la industria sanitaria y por la atención a los mayores”.

PP y PSOE siguen negociando e intercambiando documentos y enmiendas hasta la hora programada para el inicio a las 16.00 del debate de los dictámenes finales en el pleno del Congreso. Las posiciones están cercanas solo en el documento sobre la reconstrucción de la sanidad pública y sobre la UE.

La vicepresidenta primera del Ejecutivo, Carmen Calvo, ha avanzado así esta misma mañana en una entrevista en la cadena SER que hay “avances” en esa negociación: “El PP es un partido muy importante. Tiene que estar en otra posición: en lo importante. Hay muchas cosas en las que discrepamos y la gente lo entiende, pero este no es el momento. Es el momento de decirle a nuestro país que estamos, porque Europa ha estado”.

El pacto europeo y la coincidencia con el debate en el Congreso han provocado que los partidos hicieran durante la jornada diferentes valoraciones. Gerardo Pisarello, de Unidas Podemos, aprovechó para congraciarse por la unión demostrada en estas negociaciones conjuntas por los países del sur gobernados por progresistas (y citó a España, Portugal e Italia) frente a “las posiciones mezquinas y nostálgicas de la troika de los países llamados frugales” del norte de Europa a los que consideró aliados del PP. Pisarello concluyó que, con esas medidas, Europa se diferencia ahora de lo que sucedió con la respuesta a la anterior crisis financiera de 2008 y se reafirmó en la obligación de mantener promesas como la derogación integral en España de la reforma laboral.

Esa tesis de Podemos fue contrapuesta con firmeza por Ciudadanos, cuyo portavoz adjunto, Edmundo Bal, tildó esa pretensión de derogar la reforma laboral del PP como “utopía y disparate” en las actuales condiciones. Bal mostró su alegría por el buen acuerdo europeo y por la buena negociación del Gobierno de Pedro Sánchez, al que animó ahora a olvidarse de políticas “populistas, nacionalistas e independentistas” para negociar ahora con la oposición más centrada en el Congreso cómo ejecutar esas inversiones. Sobre el pacto de reconstrucción en España, Cs reiteró que no podrán apoyar el documento sobre cuestiones sociales porque no permite la financiación de la educación concertada y especial en las mismas condiciones que la íntegramente pública. Cs avanzó que había logrado en sus contactos con el PSOE que se cree la próxima Agencia Estatal de Salud Pública, que también demanda el PP, para coordinar de una manera más centralizada la respuesta a futuras pandemias.

El desmarque inesperado llegó en la mañana de este martes, antes del pleno, por parte de los tres diputados de Más País y Compromís, que comparecieron para alertar que sobre el documento de recuperación económica exigen en una enmienda transacional tres condiciones: que las empresas que se acojan a las ayudas cumplan los criterios medioambientales de la cumbre de París; que esas empresas se comprometan a cerrar la brecha salarial entre géneros y que las mismas o sus filiales no puedan operar en paraísos fiscales.