España traerá ahora de Italia a 170 pasajeros de un crucero que no pudo desembarcar

El crucero Costa Pacífica, que había partido el 3 de marzo de Buenos Aires, tenía previsto atracar esta semana en Santa Cruz de Tenerife, Málaga y Barcelona. Pero pasó de largo. Familiares de los casi 170 pasajeros españoles que van a bordo aseguran que Costa Cruceros les explicó que el Gobierno español había denegado el desembarco en sus puertos, como sí permitió el Gobierno francés con sus nacionales, que bajaron en Marsella. El viernes el barco llegó a Savona (Italia), desde el donde ahora se está trabajando para traerlos de vuelta.

“Se prohíbe la entrada en puertos españoles de los buques de pasaje tipo crucero procedentes de cualquier puerto”. El acuerdo del Consejo de Ministros publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE) el 12 de marzo es tajante. Con él en vigor, el Costa Pacífica no pudo atracar en Tenerife, Málaga y Barcelona. El padre de Mariana Louro y su mujer, de 85 y 93 años, respectivamente, con pasaporte español, habían tomado en Buenos Aires el barco rumbo a una nueva vida. Tras vender todo lo que tenían en Argentina, pensaban desembarcar en Málaga este jueves para establecerse en la casa que ya tienen alquilada en Antequera. Pero mientras cruzaban el Atlántico, la expansión del coronavirus empezó a golpear con fuerza a Italia y en España comenzaron a dispararse los contagios. Prohibir la entrada de cruceros en puertos españoles fue una de las primeras medidas del Gobierno.

Fuentes de Puertos del Estado aseguran que la empresa italiana, Costa Cruceros, pidió permiso para desembarcar en Tenerife a 900 argentinos y permitir la vuelta a su país, pero las autoridades denegaron esa posibilidad. Con el cierre portuario a cruceros en toda España, el barco puso rumbo a Marsella (Francia). Fuentes del Gobierno apelan a la orden publicada en el BOE para impedir su atraque. El Ejecutivo francés, frente a lo que había hecho con otros cruceros, permitió el desembarco de sus nacionales, pero denegó la entrada a cualquier otro pasajero. Apenas un día antes, los pasajeros españoles de otro crucero de la misma naviera sí habían podido bajar en Francia. El destino entonces fue Italia. El nerviosismo aumentó entre las 2.359 personas a bordo. “Si alguien nos puede ayudar, por favor, la situación es bastante incierta y estamos todos muy mal”, aseguró Juan Carlos Louro en un vídeo desde el barco el viernes.

Ese día el crucero atracó en el puerto de Savona, en Italia. El Ministerio de Exteriores trabaja estos días para coordinar el traslado de todos los españoles que quieran regresar desde cualquier parte del mundo. Costa Cruceros se hará cargo del traslado de sus pasajeros, que podrían emprender su vuelta a España a comienzos de la próxima semana en ferri. Al barco subieron sanitarios italianos a comprobar el estado de salud de tripulación y pasaje, entre ellos muchas personas mayores. Por el momento, todos están sanos. Louro, muy preocupada por los suyos, no entiende por qué no se les permitió desembarcar en España y se les llevó hasta Italia, país que está sufriendo con mayor fuerza el embate de la pandemia. Desde el Gobierno la respuesta es que se aplicó la orden en vigor. Ahora, aseguran que pronto estarán de vuelta.

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