‘Hammam’ y dulces en Estambul

A Santi Prego siempre se le recordará por su papel de Franco en Mientras dure la guerra, la última película de Alejandro Amenábar. El actor sigue con nuevos proyectos, como la nueva serie de TVE Néboa y el rodaje de la segunda temporada de El sabor de las margaritas para Netflix. Aquí nos cuenta un viaje a Estambul (Turquía) que disfrutó mucho.

Se fue de vacaciones al Bósforo.

Fui como profesor de arte dramático, en el marco de un intercambio. Me instalé 10 días allí con mi esposa y mi hijo. Nos quedamos en un AirBnb en el centro de Estambul y a mi mujer le encantó la ciudad. Hasta fantaseamos con quedarnos a vivir allí.

¿Comieron muchos kebabs?

La paradoja fue que a mi hijo, que le encanta el kebab, justo los de allí, los auténticos, no le convencían. Lo que yo más comí fueron pastelitos baklavas, con miel y frutos secos. Aquello es el paraíso para mí, que soy muy dulcero.

¿Y esos pastelitos típicos con sabor a rosa?

Son como unos cuadraditos de gelatina que se sirven con el café. Pero me quedo con los baklavas.

¿Montaron en barco?

Hicimos un par de cruceros cortos: uno por el estuario del Cuerno de Oro y otro en el que llegas hasta Asia. Lo que a mí me interesaba sobre todo era viajar en los libros: mientras estaba allí leía sobre Estambul y pensaba en cuánta historia tiene la ciudad. También visitamos el palacio de Topkapi, de la época otomana. 

Seguro que fueron a Santa Sofía.

Por supuesto, y allí dentro vimos una puesta de sol. Fue precioso. 

Cuénteme otro recuerdo bonito.

El día que comimos pescado fresco bajo el puente de Gálata. Hay muchos puestitos donde te lo hacen a la vista. Nos gustó mucho el ambiente, que era muy popular, con familias turcas comiendo. Curiosamente, nos recordó un poco a Portugal.

¿Eso fue lo que más le gustó?

En verdad mi plan preferido era ir al hammam. Frecuentaba uno del siglo XIV.