Pistas para moverse (y disfrutar) en el aeropuerto
Organizar el equipaje de mano para agilizar los controles de seguridad, hacer el 'check in online' o aplicaciones que conectan viajeros para una espera más llevadera en la terminal
Son muchos los que planeamos y nos informamos antes de viajar, entre otras cosas para saborear por anticipado la escapada. Antes de eso, hay una parada en el camino, ineludible en según qué destinos, que se llama aeropuerto, y que muchas veces se convierte en una pesadilla de desconcierto, colas y normas que cumplir. Los trámites hay que seguirlos sí o sí. Pero algunos consejos son útiles para hacer más soportable la estancia en estas lanzaderas que nos llevan volando a las vacaciones.
Informarse previamente
Cada vez que va a embarcarse en un avión, Pau García Solbes, autor del blog de viajes El Pachinko, con más de 100 vuelos al año a sus espaldas, se informa sobre el aeropuerto de destino, igual que lo hace sobre el clima o puntos de interés de la ciudad. Para él son importantes las zonas infantiles (se mueve con dos niños), cómo son las distancias hasta el embarque o los controles de seguridad. AENA recomienda conocer los trámites obligatorios (tarjeta de embarque, facturación, controles de seguridad, de fronteras y de aduanas) y realizar previamente los que sea posible. “Algunos pueden hacerse online”, precisa. Hechos los deberes, al pasajero solo le queda llegar a la terminal con suficiente antelación y cumplimentarlos de la manera más ágil.
Tarjeta de embarque
Iberia aconseja hacer el check in online y descargarse la tarjeta de embarque en el móvil. “No necesita impresora y tampoco corre el riesgo de perderla”. En el aeropuerto, lo más rápido son los quioscos de autocheck in, que también imprimen la etiqueta para facturar el equipaje. “Solo has de depositar la maleta en los mostradores de entrega rápida”. García Solbes reconoce que hacerlo así supone un ahorro de tiempo, pero también recuerda que “si viajas en familia, sacar el billete online puede significar que los adultos acaben en una punta distinta del avión”. “Si no vas a facturar y vas justo de tiempo, adelante, de no ser así, no es tan necesario”. Salvo que se trate de una aerolínea low cost que cobre por imprimir el billete.
Ante todo, mucha calma
El bloguero de viajes echa un vistazo nada más entrar al aeropuerto: si lo ve lleno y con colas, se va directo a hacer el embarque y a pasar los controles; si hay calma, “a lo mejor me puedo tomar un café”. El control de seguridad puede ser uno de los momentos más abrumadores. A la hora de preparar el equipaje de mano, “el pasajero debe informarse de los artículos prohibidos, las cantidades permitidas y cómo se deben llevar. Si todo va bien organizado desde casa, el paso será más fácil”, avisa AENA. Las medicinas pueden pasar acompañadas de su receta médica, y presentadas por separado, igual que utensilios médicos tipo jeringuillas (con aviso previo a la compañía aérea). “En el caso de prótesis u otra condición particular conviene llevar un documento que lo acredite”, insiste el operador aeroportuario español. Muchos aeropuertos cuentan con accesos exclusivos para personas con movilidad reducida y familias con niños (el criterio de los de la red de AENA es considerar bebé al menor de dos años y niño al que tenga hasta 11 años); a estas últimas se les permite pasar con los líquidos, aerosoles y geles (LAG) que sean necesarios durante su viaje, aunque es el personal de seguridad el que toma la decisión de permitir o no su acceso. Para el control de fronteras que lleva a cabo la Policía Nacional, AENA ha instalado equipos informáticos (ABC, de Automatic Border Control) que reducen las esperas; eso sí, son para mayores de edad con pasaporte electrónico.
Tecnología al rescate
García Solbes suele descargarse la aplicación de la aerolínea con la que vuela: “A veces ofrece información que no aparece en las pantallas”. Iberia Conecta es gratuita y va informando al pasajero, vía e-mail o SMS, de información importante: cambio de puerta de embarque o de asiento, opciones de vuelo si se pierde la conexión o la puerta de embarque asignada en una conexión. La app FlySmart informa sobre la oferta de distintos aeropuertos y permite un seguimiento de los vuelos en tiempo real, así como la gestión de la pérdida de equipaje. Con Air Help se pueden reclamar, rápido y desde el móvil, las indemnizaciones (hasta 600 euros) por retrasos, cancelaciones y overbooking sin hacer colas en los mostradores de las compañías; cobran el 25% de la reclamación en caso de que esta prospere.
Tiempos muertos
Los aeropuertos son, cada vez más, centros comerciales llenos de tiendas, restauración, ocio y áreas recreativas para los niños. Además de seguir el estado de un vuelo en tiempo real, la app GateGuru muestra la oferta de ocio de 125 aeropuertos de EE UU, 17 canadienses, 31 europeos, 29 asiáticos y 2 australianos. Quienes, aun así, se aburran, tienen Takecoffee, una aplicación que permite encontrar personas con las que compartir la espera en 27 aeropuertos internacionales del mundo. García Solbes recomienda a quienes vuelen con asiduidad tener una tarjeta de viajero frecuente. “Puedo entrar en las salas vip y, por 25 euros, tengo catering, prensa, baño sin colas e Internet de alta velocidad”.
El acceso al avión
Iberia ha adoptado un procedimiento de embarque ordenado por grupos que también siguen otras aerolíneas: cada pasajero lleva en su tarjeta de embarque el grupo asignado. La prioridad (grupo A) es para familias con niños y clientes con movilidad reducida. A continuación los del grupo 1, 2 y 3, de las últimas a las primeras filas del avión, respectivamente. “De nuevo, es clave llevar poco equipaje de mano: más fácil es el control de seguridad, más cómodo se está en el aeropuerto y más rápido es el embarque”, recomiendan desde la aerolínea española.
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