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Ruta Embajada a Samarcanda / 1

Herejes franceses y ‘supermarkets’ de Albania

Tras dar la vuelta al mundo en moto buscando a los grandes exploradores españoles, arranca una nueva ruta que emula, seis siglos después, el viaje a Asia Central del embajador real Ruy González de Clavijo. Arrancamos cruzando Europa

La moto Victoria en un valle esloveno.
La moto Victoria en un valle esloveno.m. s.

Tras la implosión que sufrió la Unión Soviética en 1991, surgieron una serie de estados independientes en Asia Central y Menor, popularmente conocidos como los “estanes”: Azerbaiján, Uzbekistán, Kazajstán, Tayikistán, Turkmenistán y Kirguizistán. Países remotos, misteriosos, salvajes y todavía bastante puros e interesantes para viajeros con hambre de emociones fuertes.

Miquel Silvestre en una playa de La Camarga, Francia.
Miquel Silvestre en una playa de La Camarga, Francia.

Turísticamente muy alejados de las rutas principales y el consumo de masas, las ex repúblicas socialistas ofrecen numerosas peculiaridades arqueológicas, artísticas, etnográficas y hasta catastróficas de mucho interés como pueden ser la Ruta de la Seda, el Museo Savitsky, la cuna de Stalin o el desastre ecológico del Mar de Aral.

Especialmente interesante para los trotamundos españoles puede resultar la mítica Samarcanda, enclavada en Uzbekistán y otrora punto estratégico de la Ruta de la Seda. Samarcanda fue la antigua y magnífica capital del Gran Tamerlan, emperador musulmán mongol, cuyos dominios se extendían desde China hasta la actual Turquía.

Hasta Samarcanda, en pleno corazón de Asia Central, llegó a comienzos del siglo XV un madrileño: Ruy González de Clavijo, embajador del rey castellano Enrique III, quien realizó un viaje épico que narró en un volumen considerado hito de la literatura medieval: Embajada a Tamerlán, de 1406. Es por eso uno de nuestros más precoces exploradores y también, lamentablemente, de los menos conocidos.

Tras haber terminado mi vuelta al mundo con la Ruta de los Exploradores Olvidados, pongo ahora en marcha el proyecto Ruta Embajada a Samarcanda para emular el viaje de Clavijo 610 años después y seguir tras la pista de nuestros nómadas menos recordados.

La Ruta Embajada a Samarcanda recorre en un viaje de ida y vuelta Europa Central, Los Balcanes, Turquía, Georgia, Armenia, Azerbaiján Kazajstán y Uzbekistán.

Europa

FRANCIA

Plaque que recuerda a los albigenses.
Plaque que recuerda a los albigenses.M.S.

En Francia atravieso el País Cátaro donde se fraguó la herejía albigense. En Beziers me detengo ante la gótica catedral de San Nazario para recordar que lo que se disfrazó de cruzada religiosa contra la desviación fue en realidad una guerra política contra la independencia del Condado de Tolosa de Francia. El rey Felipe Augusto buscaba la unidad de su reino aliándose con el Papa, quien le dio carta blanca para acabar con los cátaros como fuese. En la que fuera capital de los cátaros recordé la frase tan célebre como brutal que barbotara el enviado del Papa, el abad Arnoldo, cuando el capitán de las tropas reales le preguntó cómo distinguir a los católicos de los herejes. “Matadlos a todos, que Dios distinguirá a los suyos”.

ITALIA

Me dirijo a la región de la Emilia Romagna, en pleno delta del río Po. Es la Italia profunda que popularizara la serie don Camilo. Aquí se encuentran algunas de las poblaciones medievales más bellas como Modena, Rávena, Ferrara o Bolonia, ciudad universitaria famosa por sus torres. En el siglo XII, el burgo se llenó de estas espigadas edificaciones. Su función no solo era defensiva, también servían para demostrar el poder y caudales del propietario. Los documentos notariales de la época hablan de hasta ciento ochenta de estas torres. La mayoría fue demolida en los siglos siguientes. Actualmente quedan alrededor de una docena. Las más conocidas son las dos que hay en el centro, llamadas Garisenda y Asinelli, afectadas por el mal endémico de las construcciones italianas del medievo, la inclinación ante la falta de cimientos sólidos y lo inestable del terreno. Los nombres proceden de las familias constructoras. Poco más allá se encuentra la estatua de Neptuno y la Plaza Mayor y el Real Colegio de España, institución fundada por el cardenal Gil de Albornoz en 1364 y que desde entonces ha resistido revoluciones, guerras e intentos de usurpación. Allí se han educado los mejores catedráticos de Derecho Civil de nuestras universidades: los bolonios.

ESLOVENIA

Un puente en Eslovenia.
Un puente en Eslovenia.M.S.

Eslovenia impresiona por su magnificencia natural. Como ese color azul esmaltado del río que cruzo a través de un frágil puente colgante. Más del 60 por ciento del país es superficie arbolada. Un paraíso donde se permite la acampada libre, sin duda la forma más libre de alojarse.

Veo una colina no muy alta y atisbo el retazo de una pista entre la arboleda. Tomo la curva que rodea el promontorio y a mi derecha la encuentro medio escondida, cubierta de maleza. Hace mucho tiempo que nadie pasó por aquí. No veo muy bien por donde voy, pero insisto.

Llegamos a la cima y tengo ante mí el mejor solar para acampar. En un claro rodeado de árboles, con un terreno plano y blando. No hace viento ni el cielo amenaza lluvia. Planto la tienda, extiendo el saco y abro una botella de vino. La noche cae sobre nosotros. Me siento dentro de la tienda con las piernas por fuera y bebo el vino mientras me alimento de pan con queso. Un pequeño gran banquete de cosas sencillas. Contemplo el firmamento estrellado y pienso en la enorme fortuna que tengo de vivir estas cosas.

CROACIA

Cartel indicador de la distancia a los polos.
Cartel indicador de la distancia a los polos.M.S.

Croacia es país atravesado por el Paralelo 45, de modo que resulta equidistante tanto del Polo Norte como del Ecuador; ambos se encuentran a 5.000 kilómetros. La Costa Dálmata es una de esas maravillas naturales para recorrer por carretera.

Split, capital de la Dalmacia, es de temperamento más latino que eslavo. Actualmente, la ciudad vive en torno al puerto, al paseo marítimo y a la explotación turística del casco histórico, declarado Patrimonio de la Humanidad en 1979.

Ambiente mediterráneo y flores en la costa croata.
Ambiente mediterráneo y flores en la costa croata.M.S.

Diocleciano se construyó aquí su palacio de verano a comienzos de siglo IV. Fue el primer emperador en renunciar al poder. Cuentan que estando en su jardín, recibió la visita de una delegación del Senado Romano que le pedía el retorno para resolver los graves problemas que aquejaban el Imperio. Diocleciano les mostró sus rosas y se negó alegando que le había costado mucho trabajo construir su pequeño paraíso.

MONTENEGRO

El nombre del escarpado país se lo dieron los venecianos debido al color de la espesa vegetación de los Alpes Dináricos que se veían desde el mar. El litoral es aun más abrupto que el croata, pero se percibe un voraz afán urbanístico que está llenándolo todo de "macroresorts" y hoteles.

En esta irregular costa, al fondo de una espectacular bahía, está la población montenegrina de Herceg Novi, antiguamente conocida como Castelnuovo. En el siglo XVI se libró aquí una épica batallas en la que intervino el ejército español.

Pregunto a los viejos por la “Española”. Sigo sus indicaciones y encuentro las ruinas abandonadas de un castillo. Una agreste maleza se come el interior del patio de armas.

A comienzos del XVI el Imperio Otomano suponía una grave amenaza para la Cristiandad. Los turcos habían invadido Austria y se les había detenido a las puertas de Viena. Tan seria era la situación que protestantes y católicos aparcaron sus guerras y constituyeron la Santa Liga con Carlos I de España y V de Alemania como cabeza cimera. Sin embargo, las disensiones internas se mantenían y eso se pagó caro en la defensa del Mediterráneo.

Conquistada Castelnuovo por las tropas españolas del Tercio Viejo de Nápoles, la posición fue cercada por tierra y mar por los otomanos. El comandante Francisco de Sarmiento se enfrentaba con apenas 4.000 hombres a 50.000 enemigos. Las promesas de reforzar la posición nunca se cumplieron. Conminado a la rendición por el líder turco Barbarroja, la respuesta fue tan tajante como letal: “Que vengan cuando quieran”. Los turcos los aniquilaron y a los pocos supervivientes los mandaron a Estambul para ser vendidos como esclavos.

ALBANIA

Un niño mira a la moto "Victoria" en Albania.
Un niño mira a la moto "Victoria" en Albania.M.S.

Un país surrealista. Una nación que parece estar saliendo de una terrible guerra. Destruído y convaleciente del sueño megalómano del dictador Hoxha, Albania continúa siendo uno de los países más pobres del Europa.

Hay algo de nación a medio hacer. Las gasolineras albanesas tienen todas unas características comunes. Son modernas, relucientes, parecen copias de las que uno puede encontrar en Italia o Alemania. Y en todas ellas hay un habitáculo destinado a supermercado con un cartel que así lo indica: “Supermarket”. Y en todas ellas, a lo largo del todo el país, estos “supermarkets” son cajas vacías. Ninguno funciona. Ninguno vende nada. Albania es un país de "supermarkets" fantasma.

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