'EL ABUELO' DE CUBIERTA ECHA DE MENOS A SUS HIJOS. Houssein Karrit, de 59 años, ha sobrevivido a Siria, Libia y al Mediterráneo. Aspira a conseguir un empleo, se siente por fin tratado como una persona, pero nunca pensó que pasaría tanto tiempo sin ver a sus hijos. "Los españoles me han dado confianza y tranquilidad desinteresadamente”, cuenta en un restaurante turco de Reus.AP (OLMO CALVO) / Josep Lluís SellartDE LIBIA AL RESTAURANTE FRANCÉS. Hazrat Ali salió de Bangladés para ayudar a su familia y acabó esclavizado en Libia. Casi un año después de que el 'Open Arms' lo rescatase tiene un empleo en un bistró de Reus (Tarragona). Ali lleva solo dos semanas con el delantal y ya ha llenado su móvil de fotos de platos de inspiración francesa. Encima de las imágenes escribe sus nombres en español: “mermelada de manzana”, “calabacín relleno”… Sus jefes lo adoran.AP (OLMO CALVO) / Josep Lluís SellartREY MAGO Y GUARDIÁN DEL CÁMPING. Honorée Betcha, también rescatado por el 'Open Arms', fue el rey Baltasar en la cabalgata de Reus y ahora trabaja en un cámping de Vinyols. Enseña a los niños a montar a caballo, cuida de los animales y de la cocina y ejerce de guardián. Le encanta su nueva vida, pero dice sentirse muy solo. "Me gustaría conocer una mujer", confiesa.AP (OLMO CALVO) / Josep Lluís SellartSOÑANDO CON EL ASILO. Vivian vivió un infierno en Libia hasta que se lanzó al mar. La rescató el 'Aquarius' en junio y desde entonces ha rehecho su vida. Quiere ser camarera de hotel y sueña con que le reconozcan su estatus de refugiada para poder traerse a sus hijos, de ocho y seis años.ÓSCAR CORRAL / RAFA GASSÓEL REY DEL COLE. Khingsley, rescatado por el 'Open Arms' a finales de junio, ha vuelto a ser un niño. Tras años de periplo migratorio ha llegado a Francia junto a su familia. El niño ha pasado más de la mitad de su vida en tránsito y por fin está aprendiendo a leer y a escribir. "Le encanta ir al colegio y las profesoras le adoran", cuenta orgullosa su madre, Judith.AP (OLMO CALVO) / BRUNO ARBESUUN PULSO AL GOBIERNO. El rescate de Diokel Diop por un pesquero alicantino 'Nuestra Madre Loreto' puso a España en un brete. Hoy, el joven senegalés de 19 años, busca empleo clandestinamente en la huerta murciana. Su tío, en España hace más de una década, le ayuda a subsistir. "Si me hubiese preguntado le habría dicho que no viniese", asegura con cariño.Lorenzo D´Agostino / ANDREA COMAS
