Mal vamos
Esta semana se produjeron altercados con estudiantes de la UAB al grito de ¡fascistas! La universidad es, y debe de ser, centro de libertad y pensamiento de la futura ciudadanía que hacemos barrio, ciudad, país. También, y por extensión, centro de respeto, tolerancia y democracia. Lo ocurrido nada tiene que ver con la libertad de expresión, y mucho menos con la democracia, y más si la acción se produce acompañada de violencia. Todos podemos y debemos pensar de forma plural, respetando al contrario y diferente. En democracia, nadie es enemigo, solo adversario dentro de las reglas del juego. Por eso, la intolerancia no puede ser incitada por los responsables políticos, sociales e intelectuales de ninguna manera. Así, jamás un debate será productivo.
Agustín García A.
Málaga