‘Hyperloop’ extremeño
Día tras día, los trenes extremeños se estropean camino a Madrid por fallas claras en el anticuado sistema del siglo pasado. Nuestros gobernantes nos endulzan la realidad con la llegada de un nuevo tren como si fuese un regalo, cuando el resto de la Península ya disfruta de ellos desde hace lustros. Nadie mueve un dedo. Es hiriente, incluso cómico, que después de tantos años Extremadura sea la única comunidad autónoma sin contar con el AVE. Y ¿saben ustedes qué? Que este humilde extremeño ya no quiere ese obsoleto tren que alcanza los 300 kilómetros por hora. Yo quiero el Hyperloop. Para cuando nos pusieran el citado pájaro, ya nadie querrá usarlo, así que ¿por qué no saltar directamente a la tecnología del futuro? Además, combina perfectamente con nuestro bajo nivel de vida, nuestros trajes regionales y nuestras casas de piedra en medio de la pradera. También tenemos sentido del humor, aunque duela.— Carlos Barrantes Saponi. Cáceres.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.