Dennis Quaid: “Consumía cocaína a diario. Iba a estar muerto en cinco años”
En una entrevista el actor habla de sus adicciones y de cómo se sintió eclipsado por el éxito de Meg Ryan, su entonces esposa
El lunes 23 de julio, el actor Dennis Quaid daba una entrevista en el programa de televisión Megyn Kelly Today, de la cadena NBC. Pero, poco dado a aparecer en los medios y tras una larga temporada en silencio, el contenido se filtraba horas antes en diversos medios, que desvelaban lo que Quaid relataba acerca de su relación con la también actriz Meg Ryan o acerca de sus adicciones.
Tal y como filtraba el británico Daily Mail, Quaid ha hablado durante buena parte de la entrevista sobre su matrimonio con Ryan, uno de los más mediáticos de los años noventa y que puso a ambos en el candelero. Sin embargo, el despegue de la actriz y que ella se hiciera más famosa que él no terminó de gustar a su entonces marido, como él reconoce dos décadas después. "Como sabrás", le cuenta Quaid a Kelly, "cuando nos conocimos yo estaba en todo lo alto y luego mi carrera...", afirma, imitando el sonido de los frenos de un coche. "Y, tengo que admitirlo, la verdad es que me sentí como si desapareciera".
La pareja se conoció en el rodaje de Muerto al llegar (1988), se casó en febrero de 1991 y se separó en junio de 2001 (entre rumores de un romance entre Ryan y su entonces compañero de reparto en Prueba de vida, Russell Crowe). De su relación nació en 1992 un hijo, Jack, que en 2012 arrancó su carrera como actor en Los juegos del hambre y que tiene una veintena de títulos en su haber. Antes, Quaid había estado casado con la también actriz P. J. Soles (de 1978 a 1983) y después con la agente inmobiliaria Kimberly Buffington (entre 2004 y 2012), pero el de Ryan fue de lejos su matrimonio más mediático, puesto que ambos estaban en el mejor momento de su carrera en la interpretación.
"No me daba cuenta de que era tan pequeño... pero la verdad es que lo era", confiesa Quaid ahora, a sus 64 años, en la entrevista. Si la carrera de Quaid había estallado en los ochenta y siguió con una cierta potencia en los noventa, fue en esa década cuando la de Ryan explosionó, gracias a éxitos como Cuando Harry encontró a Sally (1989), Algo para recordar (1993), Cuando un hombre ama a una mujer (1994), French Kiss (1995), Adictos al amor (1997), City of Angels (1998) o Tienes un e-mail (1998).
Algo para recordar fue el principal desencadenante de ese éxito. Como recuerda el actor, cuando caminaban juntos por la calle y se veían entre fans estos sólo gritaban "¡Meg! ¡Meg!". Sin embargo, también admite que fue "una oportunidad para crecer". "Aprendí de aquello", asegura de la que hoy califica como "la relación más exitosa" de su vida. —
"Si no cambiaba iba a estar muerto en cinco años"
La entrevista de Megan Kelly a Dennis Quaid ha tenido lugar porque el actor vuelve ahora a los titulares al interpretar al expresidente de EE UU Ronald Reagan en un biopic sobre su vida; de ahí que la charla tuviera lugar en el rancho de Reagan en Santa Barbara, California. A lo largo de la charla, Dennis Quaid también habla de cómo ha vivido la paternidad, de algunos de sus mejores papeles y compañeros de pantalla y de la lucha contra las drogas, una adicción complicada por la que pasó una etapa oscura.
"En los ochenta estuve consumiendo cocaína básicamente a diario", relata. "Pasé muchas, muchas noches gritándole a Dios que por favor apartara eso de mí, que nunca volvería a hacerlo porque sólo me quedaba una hora para irme a trabajar".
Así, asegura que tuvo "una de esas experiencias de luz blanca una noche". "Entonces ya sí que me di cuenta de que si no cambiaba iba a estar muerto en cinco años. Al día siguiente estaba en rehabilitación".
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