Antártida, el mejor viaje de mi vida
Hay viajes y viajes. Y luego está la Antártida, el destino superlativo, la aventura con mayúsculas. Con ella empiezo una serie veraniega a destinos muy fríos. Para combatir esta tremenda ola de calor de agosto.
La Antártida es el fin del mundo, la única terra ignota de los mapas y para la inmensa mayoría de viajeros, el sueño más deseado. Un viaje a través del túnel del tiempo con salida en la última glaciación. No es un destino barato (¡todo lo contrario!), pero a quien pueda permitírselo le espera como recompensa un escenario de glaciares, desiertos de hielo de kilómetros de espesor, pingüineras con más de 400.000 individuos, ballenas, focas… El planeta Tierra en su estado más virginal.
Este es el vídeo que grabé durante una expedición al continente helado a bordo del Fram, un barco de la compañía noruega Hurtigruten:
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