Nathy Peluso: “No me importa en absoluto lo que tengamos entre las piernas”
La artista urbana, en plena gira con su primer álbum, actuará este sábado 16 en el Sónar
Su andar es decidido y su sonrisa contagiosa. Ríe como una niña nerviosa cuando le gusta la pregunta y otras veces piensa fría antes de responder. Está sentada con las piernas cruzadas en la mesa del céntrico restaurante El Imparcial, en el centro de Madrid, y cambia de posición cuando le explicamos cuál es el plano de la entrevista. Lleva colgado su nombre real, Natalia, en el cuello. Nathy Peluso (Argentina, 1996) tiene la capacidad de hacer sentir única a la persona que conversa con ella.
Cuando explica el fascinante universo que ha creado en su primer disco, La Sandunguera, que es el suyo, transmite el fuego de la misma voz que ha embaucado a tantos seguidores en su gira por España y América Latina. Pronto desplegará todo su arsenal en el Sónar de Día (16 de junio) y en el FIB (22 de julio). Podéis leer la entrevista aquí abajo y verla en vídeo dando play arriba.
Pregunta. Vienes de Argentina, pero a muchos nos cuesta distinguir de dónde eres cuando te oímos cantar. ¿Por qué ese acento tan enigmático?
Respuesta. Es lo que me compone a lo largo de mi vida. Me relaciono con gente de muchas partes. Me encanta mamar los acentos y las costumbres. Estudié durante años teatro físico con profesores cubanos, tengo muchos amigos dominicanos... Me gusta mucho el italiano, escucho mucha música afroamericana,... Entonces hay una mezcla de acentos increíbles. Aparte de esa construcción del personaje, que se va encontrando uno mismo como en esa parte histriónica, y desarrollas la acentuación de tus características, de tu persona. Mi acento es una de ellas. Me gusta mucho jugar con los cambios, y soy graciosa y me gusta decir las cosas de forma diferente cada vez. Y a la hora de componer, en mi música la parte verbal la concibo como un elemento sonoro. Aparte de por su significado, es un instrumento más.
P. Muchas veces juegas con ellas tanto que las deformas o las dejas a la mitad.
R. Sí, parece que esté haciendo música urba-(...). Sí, total, juego mucho con eso. Me gusta que la gente se para a escuchar qué dije. Pero me sale natural, no es algo que yo premedito.
P. ¿Por qué La Sandunguera?
R. Es una palabra que me representa mucho. Además, yo conformé una Sandunguera humana. Es una palabra que nos sugiere goce y sabor. Pero también muestro su lado humano. Y me encantan todas las facetas que reúne ese personaje. Pero realmente soy yo, y es un buen mote.
P. En tu disco presentas varios estados de ánimo y todos se contagian a quien lo escucha. ¿Cómo lo haces?
R. La Sandunguera es un paseo por varias emociones universales. Está ese Estoy Triste desgarrador y doloroso porque el que todos pasamos y es una identificación básica como seres humanos que es la que nos permite identificar la felicidad. Gimme Some Pizza es la ironía, lo sexual, lo pasional, lo perverso... Y también llevado a la ironía de por qué comer no es sexi. Es maravilloso comer. Es otro de los grandes placeres de la vida. Y mostrar que se puede hacer una composición súper enriquecida con una sola frase.
También está La Passione que es el desgarro del amor. La pasión llevada al extremo. Está My Time que es realmente una cuestión que nos planteamos todos, que es en qué gastar el tiempo, porque se pasa muy rápido. No queremos perder el tiempo en boludeces. Y es solo un interludio, pero deja un mensaje muy fuerte. La Sandunguera es la alegría, el goce, la diversión, la fiesta, la familia. El agradecimiento a lo que tengo. Y Hot Butter es la risa del derroche. Nos encontramos en una sociedad donde todo el mundo quiere mostrar lo que tiene. Y realmente no es tan necesario, porque todo eso nos distrae de lo más importante de la vida. Es como decir 'quiero derroches, ay, mi Lamborghini'. No tengo plata para uno y no pasa nada. Soy feliz igual y estoy haciendo mi disco, y tengo mi público.
P. Y también rompe con lo que vemos ahora. Estamos demasiado acostumbrados a ver limusinas alquiladas en videoclips de rap. ¿Crees que esa vida real que muestras hacer que la gente conecte más contigo?
R. Yo creo que la gente conecta conmigo porque soy sincera. Porque mi propuesta musical sale puramente desde el corazón y no hay ninguna pretensión más que brindar a mi público música de calidad que los haga sentir. Partiendo de allí, es algo que no falla porque está hecho de verdad. Y la verdad triunfa ante todo siempre.
Yo soy una artista que se muestra con sus defectos y sus virtudes y no me avergüenzo de ellos. Y me muestro segura por cómo soy y me quiero así. Y eso a la gente le encanta porque todos nos identificamos con ello y porque es nuestra condición de humanos. Admirar a alguien que se quiere por cómo es y darnos cuenta de que nosotros somos iguales, y podemos disfrutar de ella con una herramienta tan única como lo es la música en el mundo, es como una unión maravillosa. Ellos me aportan cosas a mí y yo a ellos. Es un lazo hermoso el que creo con mi público, porque estoy haciendo mi música y a la vez estoy identificándome con ellos en algo tan hermoso como la humanidad, la sinceridad y la igualdad.
P. Lola Flores sentía pena, penita, pena y tú estás triste.
R. ¡Tienes razón! No me había dado cuenta. Lola Flores es una artista a la que yo admiro no te puedo decir cómo... La conocí ya entrada en la veintena, yo no me he criado con ella. Pero me ha enseñado mucho. Más bien me he identificado. Es una mujer artista, libre, sincera, pura, con fuerza. Al igual que cualquier folclórica guerrera como pueda ser, cada una dentro de su campo, Mercedes Sosa o Gloria Estefan. Obviamente no tiene ni punto de comparación con mi propuesta. Yo soy rechica y me queda un montón por desarrollar. Pero sí que es verdad que ellas son divas a las que admiro y a las que rindo culto.
P. ¿Sientes que formas parte de una nueva generación de la música urbana?
R. Yo no siento que forme parte de ninguna generación, ni siento que sea un claro ejemplo de lo que viene a ser la música urbana. Soy una chica que hace rap, me puedo encontrar en la salsa, el soul, la balada, en el bolero, en la bossa nova... En lo que yo quiera porque amo la música y me desvivo por ella. La música urbana forma parte de mí y me siento muy afortunada de poder representarla de esta manera. Y de poder llenar teatros con instrumentos orgánicos y bandas.
Nathy es una mujer fuerte que se ofrece al mundo como lo que es y acierta. El folclore recorre sus venas, alimentadas por un palpitante corazón que muestra desgarrada cuando se emociona cantando Estoy Triste, o sacudiéndose frenéticamente sobre un escenario, provocando vítores. Tiene la boca de plata, cocina boloñesa y no se toca con la mano fría. Advierte del peligro de caer en las etiquetas: "Yo siempre digo lo mismo. No me importa en absoluto lo que tengamos entre las piernas".
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