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Cinco mujeres podrán testificar contra Bill Cosby en el segundo juicio por abuso sexual

Solo una víctima fue autorizada a declarar en la vista contra el actor que fue anulada

Bill Cosby, a la salida de la vista en la que se declaró el juicio nulo.
Bill Cosby, a la salida de la vista en la que se declaró el juicio nulo.AFP
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El segundo juicio contra Bill Cosby por asalto sexual se complica para la defensa. El juez Steven O´Neill autorizó que cinco mujeres que acusaron al actor de abusar de ellas en el pasado testifiquen durante el proceso. La fiscalía pidió que fueran 19 supuestas víctimas las que contaran su historia. En el primer juicio se permitió a solo una. La selección del jurado comienza el 29 de marzo.

En un caso sin pruebas, la credibilidad es clave. Los abogados de Andrea Constand buscaban por eso que pudieran testificar el mayor número de mujeres posible para así poder demostrar que su recuento no era un error y contrarrestar a Bill Cosby con el argumento de que siguió un “esquema planificado” para asaltarla. El equipo de la acusación insiste que todas ellas comparten similitudes.

La fiscalía podrá de esta manera demostrar que hay un nexo con otros casos que no pudieron ser juzgados, porque prescribieron. En la vista preparatoria del nuevo juicio argumentaron ante el magistrado que Cosby tenía una posición de poder sobre todas ellas gracias a su fortuna y a su fama. Utilizó su capacidad de comunicación, añadió la acusación, para cautivarlas y las incapacitó drogándolas.

La táctica es simple. Si crece el número de casos a examen, se reduce la probabilidad de que la víctima se haya inventado el asalto. “Bill Cosby tenía un sistema para satisfacer sus necesidades sexuales”, reiteró el equipo de abogados de Constand la semana pasada en Norristown, “es un depredador”. El juez preguntó si podía lograr demostrar ese patrón con menos testigos, porque temía crear un falso prejuicio.

Steven O´Neill, que presidió el primer juicio, admitió en la vista preparatoria que se corría el riesgo de que el caso fuera juzgado por el público y ordenó entonces que no se hicieran públicos los nombres de las testigos. No entró a decidir si las mujeres debían ser identificadas como víctimas, acusadoras o testigos. En el anterior proceso solo permitió el testimonio de Kelly Johnson.

El juicio comienza el 2 de abril. La defensa, liderada por el abogado Tom Mesereau, trató de limitar el número de testigos diciendo que la acusación buscaba reforzar su caso con alegaciones que datan de hace cinco décadas y sobre las que no hay pruebas. Consideró que esta estrategia busca confundir al jurado aprovechando el movimiento MeToo tras el escándalo protagonizado por Harvey Weinstein.

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