Las historietas de Forges fueron también nuestra Historia
Aprendimos y reímos con su historia de la Transición, y la consolidación y crisis de nuestra democracia
Desde que me sumergí de niño en la lectura de Galdós, supe que la historia de España, sangriento siglo XIX, nos fue narrada en viñetas y caricaturas satíricas por un periodismo arriesgado y en agitación permanente.
Las páginas de EL PAÍS han contado desde siempre con historiadores inmensos. En ese cuadro de honor, brilla por derecho propio Antonio Fraguas de Pablo. Aprendimos y reímos con su historia del franquismo, la Transición, y la consolidación y crisis de nuestra democracia. Sus historietas e historias fueron también nuestra Historia.
Golpeado por la pena, he conocido hoy en Bruselas la muerte de Forges, a quien tanto admiré desde que le conocí en el memorable Congreso de Caricaturistas y Humor Gráfico en Granada en 1979. Tenía yo 17 años y ya llevaba dos publicando viñetas e historietas desde Canarias. Le he tenido por amigo y frecuentado desde entonces. Duele en el alma su pérdida en lo personal: tuve la suerte de disfrutar de su amistad. Pero es sobre todo un quebranto para la historia de España del último medio siglo: porque ni se la puede contar ni explicar sin sus viñetas, ni hay un solo episodio de cuantos nos han marcado a quienes lo hemos vivido que no haya escrito Forges genialmente con sus "monos", sus personajes, el lenguaje de sus chistes, sus más de forrenta años sin faltar un solo día a su cita con su chispa y con los españoles.
Nuestro cariño siempre y nuestra gratitud con Antonio Fraguas, Forges.
Juan F. López Aguilar es catedrático de Derecho Constitucional y eurodiputado.
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