Una protectora pide 40 años de cárcel por hacinar a 55 perros en 30 metros cuadrados

Arrinconados, con la mirada perdida y llenos de heridas. Así encontró la Guardia Civil hace cuatro años a 55 perros en una parcela de 30 metros cuadrados en Villa del Prado (Madrid). El dueño, que ayer miércoles declaró ante el Juzgado de lo Penal número 3 de Móstoles por un delito del maltrato animal, ha señalado que no conocía el estado de los animales porque cuando iba a darles de comer era de noche y "no veía cómo estaban". El hombre también se ha justificado alegando que las condiciones de los animales de caza son distintas de los de compañía. El juicio ha quedado visto para sentencia

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La protectora El Refugio se ha personado como acusación particular y ha pedido para el acusado 40 años de cárcel por un presunto delito de maltrato animal, nueve meses por cada uno de los perros. Además del cierre de la parcela donde se encontraban los canes, la protectora ha reclamado que el juez inhabilite al cazador para el ejercicio de las profesiones, oficios o comercio que tenga relación con los animales. La Fiscalía, ha pedido una pena de un año y medio de cárcel.

El Servicio de Protección a la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona) encontró a los animales el agosto de 2014 en "muy malas condiciones". La propiedad estaba dividida en secciones de dos metros cuadrados donde el cazador encerraba a los perros de seis en seis. Además de los 55 que rescataron, el Seprona encontró a otros dos perros muertos en avanzado estado de descomposición.

La Federación de Asociación Protectoras de Animales de la Comunidad de Madrid (FAPAM) ha detallado que la finca carecía del calificativo oficial de núcleo zoológico. Los perros, la mitad sin el microchip obligatorio, estaban atados y algunos vivían hacinados sin ningún tipo de protección para el sol ni la lluvia.

El dueño ha culpado de la mala alimentación de los perros a un amigo al que le había encargado la tarea de darles de comer. También ha afirmado que a los animales los veía un veterinario que y que le había entregado un boto con antibióticos.

"Muchos de ellos murieron al salir", ha asegurado uno de los miembros de la protectora que acudieron a la puerta del juzgado con pancartas. En un vídeo del rescate, puede verse como algunos de los perros se desplomaban en el suelo a causa de la deshidratación que sufrían. La FAPAM ha relatado que las bolas de pienso estaban mezcladas con las heces y los orines de los canes. "Los animales presentaban diversas heridas sin recibir atención veterinaria. El caso más grave es el de un macho con heridas en los testículos llenas de gusanos", han destacado.

Al juicio han acudido los dos veterinarios que atendieron a los animales tras ser rescatados.  Ambos han coincidido que el estado de los perros era "moribundo" y que las condiciones higiénicos-sanitarias y de salubridad del recinto donde vivían eran muy malas.