¿Puigdemont?
Carles Puigdemont fue presidente de la Generalitat de Cataluña y, como tal, máximo representante del Estado español en aquella comunidad. Él mismo renunció a ese estatus al autoproclamarse presidente de una imaginaria república catalana independiente. Ahora sus partidarios lo proponen como único candidato posible a la presidencia de Cataluña, esgrimiendo como argumento su legitimidad de origen. ¿A qué legitimidad se refieren: la de presidente de la Generalitat o la de presidente de la república independiente? Si la opción es la primera, cabría preguntarles a sus seguidores y votantes, que pretenden reinstalarle en el cargo que despreció contra viento y marea, si de verdad creen que un personaje de sus características e historial es el representante ideal para Cataluña de ese mismo Estado español del que quiso separarse y al que continuamente pretende denigrar y desacreditar.— Armando Alfonso. Santa Cruz de Tenerife.
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