21 fotos35 cosas que merece la pena comprar en el 'todo a cien'Para necesidades simples no hace falta tirar la casa por la ventana. Hay artículos por pocos céntimos muy apañados y con calidad aceptableSalomé García24 dic 2017 - 12:21CETWhatsappFacebookTwitterLinkedinBlueskyCopiar enlaceA su trantrán, la cesta de la compra sube de mes en mes. Sin ir más lejos, el Índice de Precios de Consumo (IPC) se alzó un 0,5% en noviembre respecto al mes de octubre. Si echa la vista atrás comprobará que la tasa interanual se eleva hasta un 1,7%, según revelaba hace unos días el Instituto Nacional de Estadística (INE). Todo este mareo de cifras es solo para recordarle que nunca está de más ahorrar. ¿Es usted de los que cree que lo caro siempre compensa? Craso error. Las nuevas tiendas de conveniencia, ya sean regentadas por orientales o con pátina de low-cost de diseño —Hema, Tiger—, le ofrecen un buen puñado de básicos de calidad razonable para esas necesidades simples para las que tampoco es necesario hacer un dispendio.No serán los más resistentes del universo ni tendrán colores ni diseños como para lanzar las campanas al vuelo. Pero para una fiesta con niños de mediana edad —esa en las que lo que más les fascina es explotarlos sentándose encima o pisoteándolos— son ideales.Acaba de llegar a la oficina y descubre que se ha dejado los cubiertos en casa. Si le da yuyu comer con esos sin dueño que siempre quedan en la cocina del trabajo, hágase con unos baratos en el establecimiento más cercano. El pack suele llevar 12 o 20 unidades. Le sobrarán para tener un detalle con sus colegas dejándolos en la oficina. O quizá resulta que estrena piso. ¿Va a invitar a todos sus amigos? Paso 1: guarde las alfombras iraníes, si es que las tiene, para evitar manchas perennes de toda suerte de sustancias orgánicas repugnantes. Paso 2: compre varios packs de vasos de tubo desechables. Los tiene también en comercios virtuales desde 0,83 € / 6 unidades. Recuerde: mejor recoger vasos perdidos que barrer cristales.Nada como acurrucarse en el sofá con unos calcetines de rizo gordo. ¿Con Papá Noel? ¿Con gorro de elfo? Si van a ser estacionales, dése un garbeo por los reyes de los objetos innecesarios, pero atractivamente cuquis como Tiger. Desde 2 euros los encontrará con toda suerte de motivos navideños.El cambio climático nos ha traído una sequía duradera que disuade de invertir en impermeables de moda. Pero llover, puede llover en cualquier momento. No está de más tener a mano uno barato que le salve de una emergencia. ¿Es de los que antes de una carrera se enfunda en una bolsa de basura para mantener el calor? Por 0,60 € en su chino más cercano hará lo mismo, pero con más dignidad.Para el árbol de la comunidad de vecinos no estará pensando en sutilezas. Y lo mismo con el Belén. Invierta en figuritas napolitanas y adornos de artesanía para casa y hágase con adornos de plástico, madera o fieltro para salir del paso en el resto de compromisos. En comercios como HM o Tiger las tiene con aires nórdicos. En los orientales, toda suerte de papas noeles a precios insignificantes. En estos establecimientos también podrá encontrar lencería roja, porque a usted le hace gracia esa tradición de quemar el calzoncillo o el tanga (pero ni por lo más remoto piensa ponérselo). En tal caso, tire de ese tipo de frivolidades en el bazar. ¿O si lo que busca son tarjetas navideñas para identificar los regalos bajo el árbol? No se complique: las tiene a buen precio desde Ikea a su bazar favorito, pasando por Hema o Tiger.¿Quiere disfrazarse de Tina Turner, Karl Lagerfeld o Lola Flores para la fiesta de disfraces del colegio? Piense que antes de lo que cree acabará con palomitas en el pelo y restos de tarta en el pantalón. No se vuelva loco, entre en un comercio low cost, eche imaginación al asunto y hágase con el kit básico carnavalesco: peluca, gafas, sombreros…Limpiapipas, palitos de madera, bolas de poliespán… El universo de trabajos manuales escolares ha cobrado nuevos bríos con la irrupción de las tiendas low cost. Salvo que sus retoños apunten dotes de convertirse en el Salvador Dalí del siglo XXI con materiales simples tendrá suficiente. Y su presupuesto lo agradecerá.Acaba de regresar de un viaje por tierras cantábricas, desde Asturias al País Vasco, más feliz que una lombriz con sus dotes de escanciador de sidra recién estrenadas. Para dejar estupefacta a la familia necesitará vasos anchos de sidra. Tampoco tire la casa por la ventana: en Chino Antonio los tiene por menos de 1 euro cada unidad.Para Año Nuevo ha decidido disfrazarse de mosca. Necesita un par de coladores de toda la vida. Los de los bazares suelen ser de baja calidad, pero muy maleables, que es justo lo que usted necesita. Y si de madrugada los pierde, tampoco será para tanto.Entretener a los niños con juegos de toda la vida en la época de las tabletas inteligentes parece más una gesta romántica que una apuesta de éxito. Si aun así quiere hacerles partícipes del parchís, las tres en raya o las damas para que se entretengan en el vuelo hacia la playa regáleles uno de precio moderado. En Hema o Tiger encontrará variedades con diseño.Los efectos secundarios de Masterchef se pagan en la propia cocina. Estas Navidades le tocará enseñar a los niños a dar sus primeros pasos en la cocina. Le pondrán buena voluntad, pero suelen ser algo calamitosos con la limpieza. Guarde los trapos del ajuar bordados por la abuela y ponga en su lugar otros rudos del bazar. Valen también sus homólogos de Ikea.Acaba de llegar al apartamento de vacaciones y no hay delantal. Olvide sus gustos exquisitos al respecto y vaya a resolver al bazar más cercano. No tendrá filigranas, pero le evitará manchurrones de grasa al hacer la barbacoa. Luego, déjelo en el apartamento como cortesía para el siguiente inquilino.Se le ha iluminado la imaginación y va a hacer un árbol de Navidad pegando pósits en la pared. Necesitará de varios colores, incluso tamaños si pretende ponerles adornos. Vaya directo al bazar. No serán los mejores, pero satisfarán su vena creativa. Aquí también podrá encontrar libros de mandala para colorear y relajarse. Si no tiene claro que ese sea su hobby no se traiga unas creadas por el mismísimo Dalai Lama. En Tiger tienen un libro de colorear por dos euros que le hará el apaño.Feliz cumpleaños, Bienvenido a casa, Te quiero... Son bonitos detalles de hondo significado, pero en cuya transcripción no merece la pena invertir un gran presupuesto. Ahorre en esto y podrá canalizar sus euros a prepararle una fiesta sorpresa con viandas y bebidas. Si lo que busca son banderas para cócteles, aquí también las encontrará a buen precio. Un ejemplo: alguien ha tenido la genialidad de instaurar las cenas temáticas por países en su grupete de amigos. A usted le ha tocado EE UU y nada mejor que inundar la mesa de mini hamburguesas, perritos y otras delicatesen coronadas con una mini bandera del susodicho país. No se lo piense: zánjelo en el bazar chino más cercano.Le ha dado por hacer conservas. O confituras. Todo casero. Puede ir acumulando frascos durante semanas o hacerse con los necesarios justo antes de ponerse en faena. Aunque si lo que busca no son botes sino tazas de losa —y no ansía desayunar con los buenos deseos de Mr. Wonderful mientras saborea un humeante café— las tazas low cost de Ikea viven en las cocinas de los apartamentos de miles de estudiantes en todo el mundo. Si ellos pueden, usted, también.¿No quiere facturar la maleta? Tienen dos opciones para sus cosméticos: o comprar miniaturas (muy prácticas pero caras) o buscar recipientes de viaje. En los establecimientos low cost hay todo tipo de mini recipientes en todos los formatos imaginables.En el mundo de la papelería hay papeles de regalo y bolsas increíblemente bonitas. Y con precio acorde. Si no se anda con exquisiteces y solo busca resolver el envoltorio de los regalos de la familia, vaya al bazar.No hay mucha diferencia entre comprarlas en la mercería o en su bazar favorito. Pero si es un domingo por la mañana y tiene un almuerzo dentro de una hora agradecerá que su vendedor oriental le salve del apuro. Para asegurarse de que se ha colocado usted bien el pelo —si no se conforma con verse en la pantalla del móvil— consúltelo en su espejo de bolso, que también podrá adquirir en este tipo de establecimientos. Busque el más sencillo y barato. De aquí a nada, lo de mirarse en ese utensilio será un anacronismo.¿Un cactus para tener un detalle con su suegra? ¿Otra planta de interior? Los bazares se han convertido en las floristerías de conveniencia. Las plantas no suelen mostrarse rutilantemente lozanas, pero le harán el apaño. Ahora que si dispone de coche y tiempo, una visita al Vivero Shangai le descubrirá un universo botánico infinitamente más lustroso. Y no más caro.A los niños de preescolar les rechifla hacer pompas de jabón. Sobre todo, que se las hagan. Luego se empeñarán en desarrollar el proceso ellos mismos. Dos nanosegundos más tarde, el detergente estará desparramado por el suelo, el aplicador roto o ambos. Sea realista: cómprelo barato.