De delincuente a modelo millonario: la historia de Jeremy Meeks sí es el sueño americano
El considerado "preso más guapo del mundo" vive hoy una relación con la heredera de Top Shop que ambos airean con despreocupación en redes sociales
Seguro que lo recuerdas porque alguien te habló de él: el preso más guapo del mundo, el delincuente común Jeremy Meeks (1984, California, EE UU), conquistó al mundo desde la foto policial que fue tomada por la policía de California en 2014 después de ser arrestado por atraco a mano armada y condenado a 27 meses de cárcel. La policía de Los Ángeles la publicó en su cuenta oficial de Facebook y 40.000 "me gusta" dejaron testigo de que había nacido una estrella.
Mientras él veía su libertad coartada, la prensa rosa mundial celebraba la aparición de uno de sus especímenes favoritos: el guapo desconocido que aparece de la nada, el sex symbol que nace en un entorno donde nadie se esperaba la belleza absoluta.
Ni siquiera hizo falta que saliese de prisión: Gina Rodríguez, representante experta en carne de tabloide y heroínas de la telerrealidad, lo fichó como su cliente cuando él aún estaba en la cárcel
El mundo no solo no estaba dispuesto a no olvidarlo, sino que le iba a dar una segunda y gigantesca oportunidad. Ni siquiera hizo falta que saliese de prisión: Gina Rodríguez, representante experta en carne de tabloide y heroínas de la telerrealidad, lo fichó como su cliente cuando él aún estaba en la cárcel.
Pero fue la moda, siempre a la caza del exotismo más difícil todavía, quien realmente le dio el empujón definitivo. Dos meses después de salir de prisión (en marzo de 2016) ya desfiló promocionando material del equipo de baloncesto Golden State Warriors. Y en febrero de este año debutaba en la Semana de la Moda de Nueva York desfilando para Philipp Plein. El diseñador le daba la oportunidad sobre la pasarela y la exdirectora de Vogue Francia, Carine Roitfeld, lo bautizaba definitivamente para el universo del front row posando con él en su cuenta de Instagram.
De las pasarelas a las páginas de sociedad británicas: su romance con Chloe Green, heredera del imperio Top Shop (que recientemente se resquebrajaba en España), se ha convertido en uno de los más comentados del año en Europa. Un exconvicto subido al yate de un sir (Sir Philip Green, creador del imperio) y, además, un nuevo romance mediático que añadir a listado de Chloe, que ya había acaparado portadas por su relación con Spencer Matthews (actual cuñado de Pippa Middleton).
Hoy Jeremy adorna su cuenta oficial de Instagram (con 1.400.000 seguidores) con fotos más propias de un miembro de la alta sociedad que de un ex convicto. Así, podemos verlo alternando con la rapera Nicki Minaj:
O descansando en un yate en la paradisíaca localidad de Bodrum, uno de los destinos para la alta sociedad de Turquía:
Y cogiendo en brazos a Carine Roitfeld, por supuesto, a la que llama "mi madrina de la moda":
Pero lo más interesante para la prensa de sociedad está en la cuenta de su novia, Chloe Green, que sube fotos con Jeremy con soflamas de enamorada y en todos los entornos (y con todos los estilismo) posibles. Una de las más llamativas, en Barbados.
El pasado jueves la heredera se entretuvo subiendo a su cuenta de Instagram una serie de stories hoy ya borrados, pero que han sido recogidos por el Daily Mail, en los que publicaba orgullosa una imagen del modelo descamisado y posando con unos calzoncillos de la marca propiedad de su padre. Y en un ejemplo de humor que mezcla fogosidad y corporativismo, se refiere a él como "My Topman".
El que dijo que no había que mezclar amor y negocios no se imaginaba lo que puede hacer el preso más guapo del mundo.
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