Aquí se diseña la moda que viste medio mundo
Mañana sale a la venta la nueva colección H&M Studio, la más ambiciosa del gigante textil sueco
Este jueves 14 de septiembre H&M arranca nueva temporada. Y lo hace con el lanzamiento de la nueva colección cápsula de Studio, una línea premium en la que el departamento de diseño invierte hasta seis meses para su creación y desarrollo. Teniendo en cuenta que actualmente en muchas firmas de lujo sus creadores llegan a desarrollar hasta ocho colecciones al año, estamos ante una colección que se puede llamar de todo menos “moda rápida”. El equipo de diseñadores dedica tiempo y esfuerzo para lograr prendas que trasciendan en el tiempo y que sean tan bonitas que no queramos desprendernos de ellas. Al menos así lo piensan los adictos a esta línea, que agotan existencias pocas horas después de su lanzamiento este otoño. Andreas Löwenstam, el director creativo de la línea masculina de Studio, busca con pequeños detalles y giros, poner al día prendas esenciales y básicos de toda la vida del armario masculino. Para hacerlo ha tomado prestadas referencias del montañismo que introduce en jerséis, chaquetas y pantalones para los aventureros de la urbe. “Estar en movimiento requiere flexibilidad, así que nada aprieta demasiado y se han combinado muchos tejidos naturales con materiales técnicos”. Cinturones integrados, mosquetones, botones engomados, colores vibrantes y prendas ajustables quieren dar respuesta a un estilo de vida cada vez más dinámico: “Tener espíritu aventurero pide una mentalidad abierta” reflexiona el diseñador.
Esta apertura mental queda reflejada en prendas que combinan, sin ningún tipo de complejo, tradición y hipermodernidad: “Trabajar con contradicciones puede ofrecernos nuevos puntos de vista”. Para Löwenstam la yuxtaposición de lo sartorial y lo funcional puede que sea una respuesta a la necesidad de equilibrio en nuestras vidas: “Ya sea entre el pasado y el futuro, la tradición y la vanguardia, el trabajo y la vida, o incluso lo lento y lo rápido, conseguir este equilibrio me parece algo muy actual. Están pasando tantas cosas, y hay tanta oferta, que resulta reconfortante poder dar con algo tan familiar como un abrigo sastre o una camisa. Eso sí, con ese giro actual que los haga emocionantes y optimistas”.
Löwenstam, como todo el equipo de diseño trabaja en lo que en la sede central de H&M en Estocolmo, Suecia, se conoce como la habitación blanca. Ahora ya no es una habitación sino muchas en una planta entera, pero cuando todo empezó y H&M era pequeña, el equipo de diseñadores que estaba compuesto por cinco personas –ahora son trescientas– desarrollaban en una habitación blanca las colecciones.
Antes de franquear la puerta nos advierten de que no se pueden tomar fotos. Es aquí también donde se desarrollan los nuevos tejidos de la línea ecológica de H&M, así como las futuras colecciones de las diferentes líneas de la marca. Apagamos el móvil y libreta en mano vamos a intentar que las palabras se conviertan en nuestros ojos. Empieza el recorrido:
La librería de color
En este espacio H&M atesora millares de referencias de colores en fichas en las que cada color lleva asignado un número. Allí están todas las tonalidades que han teñido cada una de las prendas que ha creado la compañía a lo largo de la historia. En estos momentos cuentan con un registro de 350.000 colores. Las paletas digitales de los programas de edición son limitadas, por lo tanto, H&M trabaja mano a mano con Pantone en la creación de nuevos tonos que se incorporan en los registros de ambas compañías. Esto ocurre, por ejemplo, cuando encuentran una prenda vintage con un color muy especial. Es probable que ese tono en concreto no esté indexado, así que trabajan con el experto en color para reproducirlo, poder aplicarlo y engrosar esta maravillosa biblioteca.
Equipo de tendencias y predicción
Un paseo por este espacio es viajar en el tiempo dos, tres, incluso cuatro temporadas adelante. En láminas de cartón colgadas en la pared, el equipo de tendencias ilustra las principales direcciones de trabajo de los tejidos, los colores, las siluetas y los estampados. Tendencias globales y micro-tendencias. El marrón, el mostaza, el rojo y el verde serán colores que ganarán enteros los próximos meses dicen algunos de ellos. Como las lacas de uñas, los títulos de los paneles de tendencias siempre son divertidos y muy sugerentes: “Global Mix” reza unos, “Furry Specials” dice el otro, “Alien”, el tercero.
El armario vintage
H&M cuenta con una persona que viaja por todo el mundo y se encarga de hallar prendas vintage para este armario. Piezas de otras épocas que puedan ser útiles para los temas que se están trabajando a nivel de diseño en la actualidad, de manera que sirvan de inspiración para nuevos patrones. Estas piezas se mandan a este “armario” al que pueden acceder los diseñadores para poder investigar patrones así como tomar ideas. De hecho, para la colección de mujer de Studio el equipo viajó a Italia en busca de referencias de sastrería clásica que han servido para dar forma a los trajes que incluye la colección.
El archivo
Por otra parte, H&M cuenta con su propio archivo. Es decir, un almacén donde se conservan las prendas más significativas de temporadas anteriores. Desafortunadamente la compañía no cuenta con piezas de los primeros años, a pesar de que llegaron a poner anuncios para ver si conseguían dar con algunas de ellas.
La sala de máquinas
Aquí es donde se cosen todos los prototipos. Es decir, las prendas “muestra” que servirán de ejemplo para hacer luego la producción. Dependiendo del mercado a veces se tienen que adaptar los patrones e introducir pequeñas alteraciones.
Tenemos ganas de continuar, pero nuestro viaje acaba aquí. Dejamos atrás una misteriosa sala llamada “Habitación azul” en la que se desarrollan proyectos, por ejemplo tejidos ecológicos, que H&M guarda bajo llave. A ver si en alguna ocasión nos permiten franquear esa puerta secreta.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.