
Semillas: cuáles merece la pena incorporar en la dieta y cómo hacerlo
Han irrumpido en los cafés de corte brooklyniano , pero sus beneficios las convierten en mucho más que un trending topping

Se pueden incorporar en la dieta añadiéndolas a ensaladas o cambiando el pan tradicional por uno con semillas de girasol y sésamo.



Se pueden incorporar a un pesto, a una macedonia de frutas o utilizarlas como gachas o muesli de desayuno.

Las puede adquirir de comercio justo. Intermón Oxfam ofrece tres recetas sencillas y originales para probar en casa: hamburguesa de calabacín y chía, pudín de chía con avena y banana y tostadas de chía.

Se puede usar para recubrir en atún en un tataki, como ingrediente del pan, en una tostada con filadelfia o en el bocadillo de la merienda.

Para incorporarlas en la dieta es importante saber que primero hay que molerlas, pues nuestro organismo no es capaz de extraer todos sus nutrientes del grano. Las puede tomar en panes, galletas o masas caseras. También se puede consumir en forma de aceite de linaza en ensaladas. Además, el aceite de lino fermentado se ha probado eficaz en el tratamiento de dermatitis atópicas cuando se aplica sobre la piel.