Incendios y otros focos
Como cada verano, un sinfín de incendios forestales asola nuestra Península, incluyendo a Portugal, que este año está siendo especialmente castigado. La mayoría de ellos provocados, lamentablemente, por la mano del hombre. ¿Por qué no se castigan más duramente este tipo de ataques salvajes contra la naturaleza y las personas? No basta con perseguir a los pirómanos sino que son necesarias más políticas preventivas, la modificación de la ley de montes y la dotación de más medios materiales y personales para la lucha contra incendios, dado que cada año el número de estos y de hectáreas quemadas es superior al anterior.
Al margen de los incendios en la península Ibérica, existen otros focos muy calientes y más peligrosos en el resto del mundo: EE UU de la mano de Trump, Corea del Norte, Venezuela, Turquía, Israel/Palestina, Siria, Irán, Irak, Sudán del Sur y un largo etcétera. Mientras el mundo esté dirigido por fanáticos, dictadores, descerebrados, ignorantes y demás, corremos serio peligro de que nuestro planeta salte por los aires en cualquier momento y sin previo aviso. Ya se vislumbra el principio de la mecha.— José Manuel Fernández-Arroyo Castellano. Barcelona.
