Universidad española
Se pregunta Fernando Vallespín en su artículo del 20 de agosto qué le pasa a la Universidad española. Hay más motivos de preocupación, por ejemplo, la ratio entre profesor y doctorandos + posdocs: mientras que en las Universidades punteras es como mínimo de uno a tres, en España es de tres a uno o superior. Es decir, para los mismos recursos hay demasiados profesores permanentes y demasiados pocos doctorandos y posdocs; y sin su innovación y ambición, el rendimiento baja. Y no solo se trata de aumentar los recursos, sino de recortar departamentos con plantillas permanentes inflacionarias, algo no popular. Además, está el sistema de acceso del profesorado: a pesar de mejoras puntuales, sigue siendo no competitivo para atraer y conservar a los mejores.— Lluís Fontboté. Ginebra (Suiza).