Luis Merlo sufre una insuficiencia respiratoria
La familia informa que el actor ha estado sedado y con respiración asistida, pero que evoluciona bien
Luis Merlo ingresó la madrugada de ayer en el Hospital General de Villalba (Madrid) aquejado de una "insuficiencia respiratoria", de la que evoluciona "favorablemente", ha anunciado este jueves la familia del intérprete, de 51 años, en un comunicado en el que añaden que están "esperando su alta para las próximas horas".
"Se trata de un episodio puntual, y la evolución ha sido favorable, esperando su alta en las próximas horas para continuar con toda normalidad su periodo de vacaciones e inmediatos compromisos profesionales", señala la nota. Luis Merlo (Madrid, 1966), precisa el comunicado, ingresó en urgencias del hospital "por un episodio de insuficiencia respiratoria. Fue trasladado a la UCI del mismo centro, donde recibió sedación y respiración asistida durante unas horas".
El actor agradece el interés mostrado por los medios de comunicación, amigos, compañeros y todos aquellos que le han apoyado de forma particular y desde las redes sociales, así como a los profesionales del Hospital General de Villalba por el trato que está recibiendo de ellos
En estos momentos, Luis Merlo, hijo del desaparecido Carlos Larrañaga y de María Luisa Merlo, estaba de vacaciones después de un año en el que ha compaginado el rodaje de la serie de Telecinco La que se avecina, en la que interpreta el personaje de Bruno Quiroga (que volverá a representar en la décima temporada de la ficción), con la obra de teatro El test, que retoma las funciones el próximo mes de noviembre en el Teatro Cofidis Alcázar de Madrid.
El mismo martes, el actor escribía mensajes en su cuenta de Twitter, en la que es muy activo. “No somos aquello que logramos en la vida, somos todo lo que superamos” o “Las cosas buenas llegan cuando se es paciente, las mejores cuando no nos rendimos”, son dos de las frases que leyeron sus 26.600 seguidores en la red social. Su agente habló por teléfono con Luis Merlo sobre las once de la noche del martes, según contó a EL PAÍS, y estuvieron tratando cuestiones de trabajo.
