¿Por qué Edie Campbell sigue siendo el rostro de Londres?
Mario Testino la alzó como la embajadora del nuevo estilo Brit. Una década después, ya es una veterana con su propia marca e imagen de YSL
Con el pelo despuntado y un poco de kohl en los ojos, Edie Campbell nos recibe diez minutos antes de lo previsto en un céntrico hotel de París. A pesar de la locura que acompaña a la ciudad estos días —es la Semana de la Moda—, su grave pero calmado hello, tan característico de las niñas rebeldebien de Londres, denota tranquilidad y menos heroin chic del que imaginábamos. Lleva a sus espaldas una larga mañana de entrevistas como embajadora del perfume Black Opium de YSL, pero la resaca de los desfiles no parece ir con ella.
Su rostro prerrafaelita y casi 180 centímetros de estatura no son fruto de la casualidad; esa armónica fisionomía la lleva en los genes. "Mi abuela fue modelo y mi madre editora de moda, pero si estás pensando que cenaba todos los días con Mario Testino estás equivocada", dice riendo. "Tuve una infancia mucho más normal de lo que te imaginas". Normal... con matices. Edie Campbell (1990) nació en el barrio acomodado de Westbourne Grove, Londres, en una familia vinculada a la moda y el arte. Nieta de Joan Hicks, una reputada modelo de los 50, su madre Sophie trabajó para la revista Tatlery como estilista para Azzedine Alaïa, antes de dedicarse a la arquitectura y al diseño de boutiques de lujo. Desde los cinco años Edie monta a caballo, para ella "lo más parecido a hacer yoga".
Edie es de esas chicas que todo lo hace a lo grande. También sus inicios en la moda. "Un amigo de mi madre me llamó para hacer un casting en el Vogue británico. Estaban organizando un editorial de moda con nuevos rostros de la ciudad y pensó que yo podía encajar. Fue mi primera sesión de fotos". Y junto a Mario Testino, nada menos. Este reportaje,Young London, se convirtió en 2006 en un referente del quién es quién en la savia nueva de Reino Unido, e incluía otros rostros como los de Agyness Deyn, Alice Dellal o Tom Guinness. En ese momento, el fotógrafo peruano se convirtió en su padrino, abriéndole las puertas de la moda. "Uno de los momentos cruciales de mi carrera fue cuando posé con 16 años junto a Kate Moss para Burberry. Estaba tan nerviosa que se me explotó un boli en la boca mientras esperaba en el set...¡Imagina la escena!".
Mucho ha llovido desde entonces. En estos diez años, Edie ha sido imagen de Marc Jacobs, Alexander McQueen, Saint Laurent, Lanvin... y musa de Karl Lagerfeld. Desde 2014 representa la belleza cosmopolita de Yves Saint Laurent Beauté, siendo rostro del oscuro y rebelde aroma de Black Opium de la firma francesa. La última campaña que ha protagonizado, ambientada en una noche de esas que hacen historia, nos pone en bandeja la pregunta de si la Edie real es tan fiestera como el personaje. "Soy más tranquila, pero me encanta salir por Londres, sobre todo a bailar britpop".
Desde esa portada generacional que retrató Testino, Edie Campbell ha acumulado un sinfín de desfiles, así comoportadas en Vogue, Love Magazine, Numéro o W. Una larga trayectoria que la ha convertido en esa esa top model experimentada que miraba con tanto respeto cuando era adolescente. "La verdad es que con esta edad ya somos unas abuelas en mi profesión", bromea.
El histórico pelo de Campbell
Es un buen reflejo de las modas capilares de los últimos 10 años. Hay infinidad de tumblrs dedicados solo a su cabello. La conocimos con una melena infinita y flequillo denso a lo Joni Mitchell, pasó por un corte de chicazo y un long bob pelirrojo. En cuestión de maquillaje, es fiel al iluminador Touche Éclat Star Edition y el bálsamo Top Secrets Perfector, ambos de YSL Beauté.
Pero dejar pasarelas y portadas tampoco le preocupa; el año pasado se graduó con matrícula de honor en Historia del Arte por la Universidad de Londres y Itchy Scratchy Patchy, la firma que fundó junto a su amiga Christabel MacGreevy, va viento en popa. "Nos conocimos con 5 años, y desde los 17 somos inseparables. Creamos la marca para seguir divirtiéndonos juntas". Lo que comenzó con unos parches de referencias pop se ha ampliado a una colección de camisetas, chaquetas y vaqueros reciclada de prendas denim de los 90 que prepara su desembarco en Tokio. Y fuera de su propia marca, ¿qué diseñadores le gustan? "Me encantan Charles Jeffrey y Hillier Bartley". Todo muy British, por supuesto.
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