Desinstitucionalización
Tiempos convulsos, crisis sociales, incertidumbre, irracionalidad y desmoronamiento de las instituciones que creíamos hasta ahora sólidas, pero que no hemos dudado en apedrear. Se palpa el malestar social, influido por nuestro individualismo y nuestros miedos, y los sucesos desconcertantes pueden interpretarse a la luz del derribo sistemático de los consensos e instituciones básicas que forjaban nuestra convivencia: Europa, amenazada por el Brexit, los nacionalismos infantiles y los populismos adanistas; la paz mundial, socavada por actitudes arrogantes de personajes banales como Trump o Putin; el periodismo, acosado por la posverdad; los derechos laborales, amenazados por la loada revolución tecnológica; la reflexión y el debate, ardiendo en la hoguera de las sacralizadas redes sociales. Al final, nos quedará vivir con nosotros mismos.— Carlos Trueba. Asturias.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.