Selena Gomez: “Era una adicta a Instagram”
La cantante protagoniza su primera portada tras regresar de su retiro y asegura que ya no tiene la aplicación en su móvil en la que tiene 113 millones de seguidores
Selena Gomez anunciaba el pasado mes de agosto su retiro temporal de los escenarios. En noviembre, se dejaba ver de nuevo en una alfombra roja; en diciembre anunciaba un contrato millonario con la firma Coach y no fue casualidad que se sentara junto a Anna Wintour en el front row de la reciente Semana de la Moda de Nueva York. La cantante protagoniza ahora su primera portada en una revista desde que regresara de su retiro voluntario. Y no es una publicación cualquiera: la cantante y actriz debuta por primera vez en la portada de la edición estadounidense de la revista Vogue. Una entrevista en la que la persona con más seguidores en Instagram (en concreto, su cuenta tiene 113 millones de seguidores) se sincera.
“Tan pronto como me convertí en la persona con más seguidores de Instagram, me asusté un poco”, admite en el número de abril de la publicación. “Se había convertido en algo que me consumía. Me levantaba y me iba a dormir con ello. Era una adicta, y veía cosas que no quería ver y me metía cosas en la cabeza de las que no me quería preocupar”, se confiesa Selena Gomez. Probablemente por ello, decidió desaparecer un tiempo de la red social a la vez que se bajaba de los escenarios. Y aunque en noviembre volvió a publicar su primera foto, lo cierto es que ahora lo hace a cuentagotas. Según cuenta a la revista, hoy no tiene la aplicación en su móvil y dice que ni siquiera tiene su contraseña, quien publica en su nombre en las redes sociales es su asistente. “Siempre me sentía como una mierda cuando miraba Instagram”, sentencia ahora en una entrevista en la que ha sido fotografiada por el reconocido fotógrafo de moda Mert Alas, y que ella (o, mejor dicho, su asistente) ha compartido en su Instagram.
En sus declaraciones, la cantante, de 24 años, se muestra más que dispuesta a hablar de su retiro de los focos —como ya hizo en su emotivo discurso de regreso en los AMAs—, pero de lo que no suelta prenda es de su actual relación con el cantante The Weeknd ni tampoco de su relación pasada con Justin Bieber. “Cómo puedo decir esto sin que suene raro… Simplemente no puedo esperar a que la gente se olvide de mí”, responde al ser preguntada por su actual pareja.
Fue la presión de los focos y sus problemas con la ansiedad y la depresión lo que la obligaron a suspender su gira Revival (le quedan unos treinta conciertos) para ir a terapia durante 90 días y solucionar sus problemas mentales. Algo de lo que hoy habla sin pudor con el fin de ayudar a quienes puedan sufrir lo mismo que ella. "Mi autoestima estaba destruida. Estaba deprimida, con ansiedad. Empecé a tener ataques de pánico antes de salir al escenario o bien nada más abandonar el mismo. Básicamente, sentía que no era buena, que no era capaz". Superada esa etapa, hoy en su red social ya hay fotos de su vuelta al estudio de grabación.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.