Dicursos sobre la feminidad
Los diseñadores no se conforman con lo trillado y elaboran propuestas para la mujer lejos de las obviedades
“Quería explorar la complejidad y la contradicción y al mismo tiempo crear algo nítido y auténtico. Un diálogo entre el color y la textura, el cliché y la abstracción”, explica Sander Lak traduciendo en palabras la propuesta que este diseñador formado en Dries Van Noten presentó este lunes en Nueva York. Era su segunda colección y después de su brillante debut en febrero, todos los que son alguien en la industria de la moda esperaban con expectación en la maravillosa biblioteca de la New York City Bar Association. Lak, que contó para la presentación con la ayuda de Lotta Volkova, la estilista del colectivo Vètements, ofreció de nuevo una colección intensa y visual en la que sus prendas drapeadas, de ricas texturas, tacto suave, volátiles y de paleta dulce contrastaban con las poderosas plataformas que aferraban a las modelos al suelo. Vestidos con tirantes que caen por el hombro, camisas rosa pastel de apariencia crujiente y tops cruzados que envuelven el cuerpo contenían equilibradas dosis de poesía y realidad.
Altuzarra, una de las grandes promesas del diseño estadounidense, ofreció también un interesante juego de contrastes. Inspirado por el espíritu rebelde de los protagonistas de la película Wild at Heart de David Lynch, subió encima de la pasarela una colección de prendas de tono lúdico y atrevida superposición de estampados que destacó por una alta calidad de materiales y una delicadísima factura. Lejos de caer en la cita fácil, Joseph Altuzarra se llevó con maestría la referencia a su terreno y dibujó una Lula, el personaje de Laura Dern en la película, llena de matices. En la atención a los detalles se nota que el diseñador disfrutó:“fue un proceso muy divertido”, explica después del desfile. Una impecable gabardina de pitón bordada de rosas rojas, coquetos conjuntos de volantitos con estampados de cerezas, vestidos rayados de canalé desde los que asoman tops floreados ilustran esta colección “optimista, vibrante y erótica” .
La reivindicación de una mujer lejos de estereotipos estuvo presente en el desfile de Prabal Gurung. El diseñador mencionó a su madre y a la activista Gloria Steinem para hacer una oda al “feminismo moderno”, que tradujo encima de la pasarela con una colección de siluetas fluidas que incluía estampados inspirados en William Kentridge. Por su parte, Tome, una marca muy comprometida con las mujeres, aportó su granito de arena al ofrecer una imagen más real de ellas con un casting muy diverso. La colección que incluía apetecibles estampados elaborados por un colectivo de mujeres en la India.
Carolina Herrera reunía a la alta sociedad neoyorquina en el exclusivo palacete Collection Frick del Upper East Side, y hacía desfilar en su jardín una colección que mostraba la veteranía de la diseñadora. Herrera, que cumple 35 años en la industria de la moda este año, introducía algunos guiños a la cultura juvenil para traducirlos a su propio lenguaje. Sus modelos desfilaron con impolutos vestidos de fiesta y calzadas con cómodos zapatos planos sin perder un ápice de elegancia. No olvidemos que ella fue quien descubrió la versatilidad de la ubicua camisa blanca.
El detalle es el protagonista
Custo Dalmau apuesta por un prèt-a-porter muy elaborado y manual para crear piezas que destaquen en un mercado copado por la moda rápida: “El detalle es el protagonista. Se trata de crear una pieza única y diferente”, explicó horas antes de desfilar en Nueva York. “Hay piezas muy complicadas de reproducir a nivel industrial”, relató sobre su particular estrategia para diferenciarse y sobrevivir en un mundo de la moda “muy competitivo y dominado por las grandes corporaciones”. Bajo el lema de "más es más", su nueva colección elaborada íntegramente en el taller que Custo tiene en Barcelona, mezcla intrincadas técnicas artesanales, con acabados y sorprendentes tejidos de última generación. Dalmau, que lleva 20 años desfilando en NuevaYork, no considera la pasarela un discurso comercial sino un banco de pruebas desde el que expresarse: “la creatividad es nuestro motor. No tiene sentido estar aquí si no somos capaces de crear algo nuevo.”
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