Fracaso escolar
Max Theiler, premio Nobel de Medicina 1951 por desarrollar la vacuna contra la fiebre amarilla, decía que no se puede educar a una persona, solo puede crearse un ambiente en el que ella misma se eduque. Maestros y profesores no pueden enseñar a no ser que los alumnos estén abiertos a aprender; en este campo la cerrazón resulta impenetrable. Uno diría que el elevado fracaso escolar en un país donde la enseñanza es gratuita y obligatoria exige un esfuerzo de los que fracasan para hacerlo. No parece imposible que entre escolares pueda haberse implantado una cultura contraria al aprendizaje de materias para ellos sin utilidad inmediata, reforzándose entre ellos su rechazo. Eso —en parte— podría explicar su fracaso.— Eliseo Pascual Gómez. Alicante.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.