11 millones de firmas piden el cierre de la feria de carne de perro en China

Una vez al año desde 2009, y durante dos días, en el sur de China se venden cientos de perros y gatos en la calles para atraer al turismo. No los venden como mascotas, sino como alimento. El mercado de carne de perro de Yulin, en la provincia de Guangxi, comienza este martes en medio de una polémica que envuelve a esta práctica desde hace años, desde que se publican imágenes en la que se muestra cómo se roban los animales y cómo se les maltrata. Los animalistas tildan a la feria de "brutal" y a los vendedores, de "maltratadores" porque no dan de beber ni comer a los canes y gatos mientras yacen en las jaulas de la feria. Por eso, más de 11 millones de personas han firmado una petición formal para que se prohíba este mercado.

La agencia oficial de noticias Xinhua ha recogido la opinión de los ciudadanos chinos sobre este acto. El 64 por ciento de los encuestados rechazan la tradición porque "daña la reputación de China". Pero, en un país donde cada año se sacrifica entre 10.000 y 20.000 perros y gatos en sus calles, otros defienden la matanza al considerar que el apego por las mascotas en este país no es equiparable al de Occidente.