Bolsos de Gucci como ofrenda a los difuntos chinos

La firma de moda y complementos de lujo Gucci no aprueba que se vendan copias de sus bolsos bajo ningún concepto, ni siquiera cuando se trata de imitaciones de cartón que serán quemadas para rendir homenaje a los difuntos. Pero la marca italiana ha tenido ahora que disculparse públicamente por haber pedido a varios comerciantes de Hong Kong que retiraran las reproducciones en papel de sus productos por estar infringiendo los derechos de su marca registrada.

En China, los ciudadanos rinden homenaje a sus antepasados con ofrendas. En el norte del país es habitual que se queme dinero falso o comida, pero en el sur, y especialmente en Hong Kong, las familias queman réplicas -algunas muy trabajadas- de zapatos, cajas de cigarrillos, automóviles, teléfonos móviles o cualquier otro artículo que crean que sus difuntos puedan necesitar en el más allá. Las copias de artículos de lujo se han vuelto más populares en los últimos años, por lo que no faltan tampoco los coches deportivos, las mansiones con piscina o los complementos de las grandes marcas.

La demanda de estas reproducciones llega a su punto álgido durante la festividad Qingming -el equivalente al Día de Todos los Santos-, que este año se celebró el 4 de abril, pero las funerarias disponen de estos artículos durante todo el año. La misiva de la marca en cuestión urgía a los comerciantes a dejar de vender las falsificaciones de cartón de Gucci y hasta les pedía información sobre sus proveedores, que, según los medios locales, proceden mayoritariamente de la provincia de Cantón, adyacente a la excolonia británica.

Algunos vendedores se lo tomaron como una broma, pero otros ciudadanos de Hong Kong vieron en esta advertencia una intromisión a sus costumbres, y más teniendo en cuenta que en estas tiendas se venden también artículos de otras marcas de lujo que no se han quejado. La empresa decidió entonces echarse atrás: "Lamentamos cualquier malentendido que pueda haber sido causado y pedimos disculpas sinceras a cualquier persona que pueda haberse ofendido por nuestras acciones", dijo la compañía en un comunicado, informa France Presse. Gucci aseguró que envió las cartas "como parte de los esfuerzos para proteger su propiedad intelectual" y que en ningún caso querían interponerse en las tradiciones funerarias de los hongkoneses, a las que conceden "un respeto máximo". La marca dijo que no tomaría ninguna acción legal ni pediría compensaciones a pesar de que los bolsos y zapatos de cartón llevan estampado su conocido logotipo.

La estrategia de la marca para evitar la comercialización de estas réplicas de cartón fue ampliamente comentada en las redes sociales. "Quizás Gucci debería lanzar su propia línea de productos hechos de papel para tal fin", sugería un usuario en Twitter. "¿Será que Gucci está pensando en abrir una tienda en el inframundo?", bromeaba otro.

Esta polémica es el último episodio de la intensa campaña de Gucci contra las falsificaciones en China. El año pasado su empresa matriz, el conglomerado francés Kering (propietario de otras marcas como Balenciaga o Puma), emprendió acciones legales contra el gigante del comercio electrónico chino Alibaba porque en su opinión permitía la compraventa de copias de sus productos en sus portales. Esta semana la firma italiana anunció que se daba de baja como miembro de la Coalición Internacional Anti-Falsificaciones (IACC) porque la organización permitió la entrada de Alibaba al grupo.