_
_
_
_
MIRADOR
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

¿Qué haces después de la orgía?

Iglesias sabe el efecto que produce retirarse de un lugar en el que nunca se ha estado

Manuel Jabois

Una de las virtudes de Pablo Iglesias es la comunicación, por tanto la capacidad de instalar en el ambiente una realidad paralela gracias a sus poderes de persuasión. De esta manera, durante unas semanas Iglesias fue vicepresidente del Gobierno ante el escándalo de unos y la euforia de otros. Como siempre ocurre, fue el empecinamiento de sus enemigos el que más contribuyó a darle verosimilitud a su fantasía. El último fin del odio es convertir la ficción en realidad para no dejarlo huérfano; si el odio se queda en tierra de nadie, regresa a su lugar de origen como un bumerán.

Iglesias le dijo al Rey que en un Gobierno con Podemos él sería vicepresidente, y el Rey hizo con Pedro Sánchez lo que la prensa hacía con González: contárselo. Algo ha avanzado el PSOE en 20 años. Esta semana, sin embargo, Iglesias dimitió de su cargo. Dejó la cartera en la puerta del ministerio y se fue a su casa, trasladando una imagen de humildad que ha hecho estragos entre sus fans, acostumbrados a que los políticos del PP se mantengan en su cargo pase lo que pase.

Podemos ha ganado una baza negociadora. Da igual que el juego sea de rol: lo que importa es la sensación. El amor siempre se construye desde arriba, como el desamor. Ya se sabe que el cocido maragato consiste en comerse primero lo bueno por si viene el enemigo. Hace unas semanas Fernando Savater relató lo ocurrido a un personaje de Umberto Eco, que se encontraba participando en una orgía (en las orgías, como en el casino, se participa). Cuando estaba en faena con una mujer empezó a darse cuenta de que la chica le gustaba de verdad, le resultaba interesante y le apetecía mucho conocerla. Así que dijo, mientras hacía el amor con ella, una de las mejores frases de la historia: “¿Qué haces después de la orgía?”.

El personaje de Eco quería algo tan romántico como tomar el primer café con ella, o encontrársela por la calle casualmente, o quizás no haberla conocido nunca. Un amor Benjamin Button en el que se empieza haciendo el amor y se acaba dejando en la primera mirada. Iglesias sabe el efecto que produce retirarse de un lugar en el que nunca se ha estado. No habrá nadie que le reproche su vicepresidencia: ha sido, en consecuencia, la más ejemplar de la democracia. Dentro de dos semanas empezará a reivindicar su gestión y habrá quien se lo reconozca. Quizá tenga razón; quizá la mejor manera de no corromperse en España sea gobernar así. Claro que se puede.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Manuel Jabois
Es de Sanxenxo (Pontevedra) y aprendió el oficio de escribir en el periodismo local gracias a Diario de Pontevedra. Ha trabajado en El Mundo y Onda Cero. Colabora a diario en la Cadena Ser. Su última novela es 'Mirafiori' (2023). En EL PAÍS firma reportajes, crónicas, entrevistas y columnas.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_