¿Me prestas tu Mercedes?
Artículo divertido e inteligente de la revista 'The New Yorker' sobre lo pesados que somos los padres para que socialicen nuestros hijos
Hace unos días hablaba con unos amigos de Washington lo realmente pesados que somos a veces los padres con que nuestros hijos tienen que compartir sus más preciados juguetes y 'socializar' con niños a los que no conocen de nada. Nos reíamos imaginando a uno de nosotros compartiendo nuestro nuevo IPad o a cualquier fanático de los coches prestando su última adquisición con trescientas mil chorradas incorporadas y tracción a muchas ruedas (o algo así).
El caso es que mi amigo me recordó un artículo divertido e inteligente -como casi todos ellos- de la revista The New Yorker. Es bueno y sólo necesitaba traducción. Os dejo con él y os deseo 'feliz todo' y que pensemos en nuestros enanos la próxima vez que queramos vestirlos de 'domingo' o forzarles a que entreguen su Elmo a un total desconocido en el parque.
By Simon Rich
Si los adultos estuvieran sujetos a las mismas indignidades que los niños…
EN UNA FIESTA
Niña Zoe: Papa, tenemos una fiesta en casa, así que tú te quedas en tu habitación. No te preocupes porque uno de mis amigos trae a su padre para que juegues con él. Se llama Comptroller Brooks y tenéis más o menos la misma edad, por lo que estoy seguro de que tenéis mucho en común. Pasaré en un par de horas para ver cómo estáis. (Se va Zoe)
Mr. Brooks: Hola
Mr. Higgins: Hola
Mr. Brooks: Bueno…eh…¿sigues la política del ayuntamiento?
Mr. Higgins: La verdad es que no…
Mr. Brooks: Bueno…
(Un largo silencio)
(Zoe regresa)
NIña Zoe: ¡Ah! Se me olvidó deciros. Le dije a mis amigos que vais a hacer un espectáculo después de la cena. Os aviso cuando sea la hora de bajar.
Mr. Brooks: ¡Dios! ¿Qué vamos a hacer?
Mr. Higgins: Yo me sé un baile…pero me da mucha vergüenza
Mr. Brooks: Bueno, vamos... enséñamelo.
EN EL CONGRESO DE ESTADOS UNIDOS
Lobista: Si no consigue usted aprobar esta propuesta, provocará la muerte de miles de personas. ¿Hay preguntas?
Senador: ¿Por qué lleva usted uniforme de marinerito?
Lobista: Mis hijos han decidido vestirme así, porque se les antojó. Le dije que era un día importante para mí...
Senador: Que mono...
Lobista: Bueno, pero ¿está usted de acuerdo con la propuesta? ¿Y la guerra?
Senador: Estaría todavía mejor con el gorro! [de marinero]
EN EL APARCAMIENTO
Lou Rosenblatt: ¿Puedo conducir tu coche? Lo devuelvo cuando haya terminado.
Señora Herson: Disculpa, pero ¿te conozco?
Lou Rosenblatt: No, pero tenemos más o menos la misma edad y utilizamos el mismo garaje.
Señora Herson: No quiero ser grosera pero no me siento cómoda dejándote conducir mi coche. Es que, además, es mi posesión más preciada.
Brian Herson (hijo): ¡MAMA! Pero bueno, ¿qué te he dicho sobre compartir?
Señora Herson: Sí, tienes razón, hijo….disculpa. Toma, las llaves de mi Mercedes.
Lou Rosenblatt: Gracias. ¿Puedo pasar por tu casa más tarde? Es que me siento solo y no tengo amigos.
Señora Herson: Bueno…la verdad es que ya tengo planes esta noche.
Brian Herson: ¡Mamá!... ¿Le estás excluyendo?
Señora Herson: ¡No, claro que no! (Suspiro). Aquí está mi dirección, señor. La fiesta empieza sobre las ocho.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.