¿Dónde rezan las estrellas de Hollywood?

EE UU es un país lleno de contradicciones debido a su extensión y a los cincuenta estados que lo conforman. Tanto es así que las celebridades que ocupan portadas por sus sex tapes, sus desfases regados de alcohol y drogas o sus infidelidades son fíeles devotos de algunas de las congregaciones religiosas más cool de Nueva York o Los Ángeles. Cierto es que el número de católicos que se reconocen como tal en 2015 no superaba un cuarto de una población que suma más de 300 millones de habitantes y que muchas de las confesiones cristianas que crecen tiene una visión más moderna de la realidad que la antigua iglesia romana, pero sigue chocando que estrellas de cine se arrodillen ante el altar de cualquier capilla.

Sea cual sea el motivo pocos son los que no cuentan con un pastor que los guíe por las turbulentas aguas de Hollywood o Manhattan. Cantantes, modelos, actores, directores de cine o empresarios buscan consuelo espiritual en las organizaciones que se ofrecen para ello y que no se identifican, en absoluto, con las austeras parroquias que se pueden encontrar en cualquier barrio español.

Hillsong, la iglesia de Justin Bieber y los hipster

Cristiana pero pentecostal, la Iglesia de Hillsong es un desmadre en el que la música orquesta prácticamente todas sus acciones. No es de extrañar, por ello, que Justin Bieber busque redimir sus pecados en la sede de Nueva York o en la de Los Ángeles. Hillsong funciona como una multinacional y tiene ramificaciones en los cinco continentes aunque su origen está en Sidney (Australia). La congregación edita sus propios discos que después vende a nivel global y eso y las aportaciones de sus feligreses hacen que sus instalaciones sean la envidia de cualquier otro fiel. Algunas publicaciones la han llegado a bautizar como la iglesia hípster y aseguran que los habituales lucen ropa de Saint Laurent Paris.

La iglesia presbiteriana de Bel-Air

Es la favorita de los que se dedican a la industria del entretenimiento en Los Ángeles. La adinerada zona de Bel-Air cuenta con este enclave que se encuentra, nada menos, que en Mullholland Drive. Si se necesitan más referencias cinematográficas para cruzar sus puertas Leonardo Dicaprio se refugia en sus bancos cuando necesita un poco de recogimiento espiritual. La recientemente fallecida Nancy Reagan solía acudir allí, lugar en el que el expresidente Ronald Reagan recibió su funeral en 2004. Y no hay que olvidar que Ronald Reagan fue actor antes que presidente y que junto a su mujer formaron uno de los matrimonios más conservadores de la historia reciente, así que se puede intuir la inclinación de esta parroquia que programa los últimos estrenos en pantalla grande para sus feligreses.

La iglesia de la Sagrada Familia de Mel Gibson

Si lo que se buscan son emociones fuertes además de encontrarse con alguna cara conocida del mundo del espectáculo, no hay que pasar por alto esta congregación joven. La capilla se construyó en 2003 con dinero de Mel Gibson, quien es uno de sus más destacados fieles, y es tan extremista que rechaza los principios del Segundo Concilio Vaticano. Situada en Agoura Hills, la nave tiene seguridad privada para evitar encontronazos con aquellos que no comulguen con sus ideas y ni siquiera está adscrita a la archidiócesis de Los Ángeles yendo completamente por libre. Eso sí, se consideran mucho más católicos que los que dirigen desde El Vaticano.

Iglesia de Santa Mónica

Aunque parecen más propias de Nueva York las mujeres que se dedican a almorzar con amigas y a pasar por misa, en Los Ángeles también tienen su lugar para ello. La iglesia de Santa Mónica está acostumbrada a los paparazzis y por allí pasa a diario María Shriver. Gisele Bundchen y Tom Brady se casaron entre sus muros en 2009. El actor Kelsey Grammer es también un habitual. Republicanos y católicos son los habituales en esta congregación que está completamente adaptada al siglo XXI, permite concertar entierros y funerales desde su página web y tiene un grupo de oración para la comunidad LGTBi que cuenta con numerosos seguidores.

Iglesia del Buen Pastor

En el 501 de Bedford Drive se dan cita las estrellas más jóvenes que hacen su vida en Los Ángeles. Por allí pasaban Frank Sinatra o Rodolfo Valentino a la búsqueda de la expiación de sus pecados y allí es donde recibieron los últimos sacramentos tras la muerte. Hoy en día son Vanessa Williams, Brooke Shields o Mark Wahlberg los que acuden con su familia a los servicios que se ofrecen a diario. Hitchcock, Carmen Miranda o Rita Hayworth también se dejaban ver por alli por lo que el glamour no ha abandonado la capilla desde los 50. George Clooney despidió a su madre, Rosemary, con una buena afluencia de estrellas de primer nivel.