Buscando a Wally (ahora en Instagram)

Jersey de rayas horizontales rojo y blanco, pantalón oscuro y un gorro de lana también rojo y blanco. ¿Quién es? Es el popular Wally, pero ahora de carne y hueso gracias a un fotógrafo anónimo que reside en Londres. Si quieres encontrarlo, tienes que buscarlo en Instagram (@wallyfound), donde cuenta con 12.700 seguidores. Y eso con solo 84 publicaciones. Esta es su historia.

Wally abrió su cuenta hace dos meses, pero su flechazo con el personaje ficticio viene desde la infancia, cuando su madre le enseñó los libros. “Fue amor a primera vista”, afirma. También explica que en esta red social encontró un buen proyecto para conectar a distintas personas, conocer amigos y hacer arte. "Hasta ahora está siendo genial, la gente ha sido un gran apoyo y tengo muchos comentarios todos los días. Me hace feliz sacar una sonrisa a las personas”, dice en declaraciones a EL PAÍS.

Sus fotografías reflejan lugares y paisajes idóneos para Wally y en los que su reconocible vestuario gana color y fuerza. Asegura no usar Photoshop, aunque hay gente que le ha acusado de ello. “No tiene ningún sentido”, responde ante las acusaciones. ”El único efecto que uso es el de lightroom para sacar los colores y hacer que la gente vea lo que yo estaba viendo en ese momento cuando estaba allí”, afirma Wally, que busca mantener su identidad oculta.

Además, Wally está aprovechando el tirón que está logrando en las redes para desarrollar un proyecto benéfico con vistas a ayudar a niños con cáncer. Por ello, ha lanzado una campaña de Gofoundme con el objetivo de crear un calendario de 2016 y recaudar fondos. Espera tenerlo antes de las navidades y que la gente se involucre y participe.“¿Sabías que a lo largo de los últimos 20 años no ha habido casi medicamentos desarrollados específicamente para el cáncer pediátrico?, estamos tratando de cambiar eso, que la gente tome conciencia y que inviertan en la investigación”, dice Wally. 

Sobre cómo prepara sus fotos, Wally confiesa que antes de sacar la cámara suele pensar dónde va a hacer sus fotos y qué espera de ese lugar. "El otro día sabía que la niebla sería muy gruesa en la madrugada, así que fui a Richmond Park (Londres) porque preveía que allí iba a conseguir una sensación mágica", explica. En cualquier caso, reconoce que "también hay veces que el azar trae bellas imágenes".