Refugiado en ruta precisa innovador social
Participante en el II Foro Internacional de Innovación Social. Foto: organizadores.
Cualquier problema público complejo requiere la combinación de tres elementos: recursos económicos, voluntad política y creatividad social e institucional. El peso relativo de cada uno de los factores depende de la situación, pero muy rara vez se puede prescindir de alguno de ellos.
La crisis de refugiados a la que hace frente Europa es un ejemplo de esta ecuación: los países de acogida están obligados en primer lugar a cumplir la ley y a dotar a sus programas de los recursos suficientes para garantizar la llegada y el establecimiento de las víctimas de la guerra y la persecución.Pero ni siquiera la mejor voluntad será suficiente. En algunos puntos críticos de este proceso, solo el ingenio y la capacidad de colaboración de aliados improbables permitirán hacer frente a una crisis humanitaria interna que no tiene precedentes desde hace 65 años.
Estas ideas fueron el argumento central de la sesión inaugural del II Foro Internacional de Innovación Social, celebrado en Valencia esta semana. Un espacio en el que el término 'emprendedor' es algo más que un recurso en boca de políticos con poca imaginación. En ella se animaba a estos exploradores del interés común a poner a prueba sus ideas en beneficio de los refugiados.
Se me ocurren al menos cuatro ámbitos en donde necesitamos ideas mucho mejores de las que tenemos:
1) Recogida de información: uno de los obstáculos principales a los que hacen frente las organizaciones y los analistas es la ausencia de datos fiables sobre los flujos de refugiados, su recorrido y sus necesidades específicas (por ejemplo, la información desagregada por edad es muy escasa, lo que hace difícil entender las necesidades de protección de los niños). ¿Es posible recabar mejor los datos, mucho más cuando buena parte de los refugiados cuenta con tecnología básica para ofrecerlos?
2)Transporte: la seguridad y fiabilidad del transporte en ruta constituye uno de los nudos gordianos de este reto, en el que los riesgos personales y económicos de los refugiados se disparan en beneficio de las mafias. ¿Podemos mejorar estas rutas con tecnología aplicada? ¿Es posible -como me sugería un responsable de una importante ONG humanitaria- concebir un Uber adaptado a esta crisis?
3)Acogida: en España, como en otros países europeos, los sistemas de acogida de refugiados están anclados en las necesidades de hace unos años, incomparablemente más bajas. ¿Qué tipo de alianzas público-privadas permitirán unir las capacidades de diferentes organizaciones y recursos sociales? ¿Podemos concebir una aplicación que facilite la acogida inmediata en hogares, por ejemplo?
4) La reforma del modelo: elevando un poco el tiro, esta crisis ofrece la oportunidad de cuestionar un modelo de movilidad humana que está completamente roto. La reforma de las políticas europeas de asilo e inmigración van a necesitar nuevas normas e instituciones que se adapten mejor a las obligaciones, los valores y los intereses de los países miembros. Un ejercicio de creatividad política que debería empezar hoy mismo.
Son solo cuatro ejemplos. Sin duda ustedes pueden pensar en otros muchos y en las respuestas que deben ofrecer. Benditas sean las oportunidades que nos brindan congresos como este para mirar más allá de nuestras narices.
[Pueden encontrar aquí una relación completa de las sesiones del foro y de los ponentes, así como otros materiales de interés.]
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.