Esta Barbie está en los huesos

¿Qué se esconde dentro de los muñecos de nuestra infancia? Jason Freeny perdió su trabajo como diseñador industrial hace unos años y empezó a esculpir la anatomía interna de los juguetes. Por primera vez, podemos verle las entrañas a la Barbie, a Papa Pitufo o a El señor Potato. Tras meses en el paro pasando momentos de auténtica desesperación, Freeny se volcó en la escultura. Se compró un Dunny, el personaje de Kidrobot, lo abrió y decidió rellenar su cuerpo con arcilla. Lo subastó en internet y ganó hasta tres veces más de lo que le había costado. Ahora sus creaciones llegan a los 15.000 euros.

Reeny lleva a cabo un meticuloso proceso: después de estudiar y analizar la forma única de cada figura, utiliza herramientas de dentista y materiales como la calabaza o la arcilla para completar el interior de cada juguete. Puede tardar entre cuatro y seis semanas en crear la anatomía interna y el esqueleto de cada pieza. Uno de los elementos más interesantes de su trabajo es que sus obras están partidas en dos, dejando la parte externa e interna visibles, para así ser comparadas. Su primera escultura anatómica la hizo en el 2010. Desde entonces, ha destripado a Stewie, Mario Bros, o el señor Potato, entre muchos otros. Podéis ver el resultado aquí.