Más de 100.000 refugiados burundeses han llegado a Ruanda y Tanzania tras al estallido de violencia y los continuos enfrentamientos provocados por los comicios en su país
Niños jugando en un ‘Espacio amigo de la Infancia’ que Plan Internacional ha habilitado en el campamento de refugiados burundeses de Kigoma, Tanzania. "Algunos presentan signos evidentes de malnutrición y muchos de ellos llegan no acompañados, lo que les expone a abusos", denuncia la organización.Una niña carga en su espalda a su hermana pequeña, en el campamento de refugiados de Kigoma.Refugiados burundeses hacen cola para ser llevados al campamento de Nyarugusu, en Tanzania.Tras la llegada masiva de los refugiados, se han registrado casos de cólera en los campamentos de Kagunga, el estadio Lago Tanganika y Nyarugusu. Ya se han contabilizado 33 muertes por esta enfermedad y actualmente hay siete casos declarados en el pueblo de Kagunga, entre los que hay también ciudadanos tanzanos.Refugiados burundeses a bordo de un autobús camino al campamento de refugiados de Nyarugusu.Niños jugando a las cartas en el campamento de refugiados de Nyarugusu. Este lugar es uno de los que cuenta con 'Espacios amigos de la infancia' de Plan Internacional para que los pequeños puedan divertirse y hablar de las dificultades que están atravesando.Niños viviendo en las saturadas estancias del campamento de Nyarugusu.Un bebé es arropado entre alfombras en una de las clases del colegio de Nyarugusu, habilitada debido a la afluencia de refugiados burundeses.“Es difícil para las autoridades mantener los servicios, dado el intenso flujo de llegadas, así que las familias están viviendo aquí con muy poco acceso a agua potable o a servicios de saneamiento e higiene”, explica el gerente de respuesta en emergencias de Plan Internacional en Tanzania, Steve William.Niños y madres haciendo cola para embarcar en el pequeño pueblo de Kagunga.Niños a bordo cruzando el lago Tanganyika hacia Tanzania.
