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Migrados
Coordinado por Lola Hierro

Nos movemos, luego, migramos

Imagen: cc Moonlightway en MorgeFile

Todos nos movemos. Todos somos migrantes. ¿Qué diferencia hay entre movilidad y migración? La diferencia consiste en que la migración cruza fronteras. Pero si creemos y confiamos en que las fronteras son relativas y meras creaciones de los ya caducados Estados-Nación, tenemos que creer en el derecho a la movilidad. Por lo tanto, la palabra migración debería extinguirse y utilizarse la movilidad como palabra definitoria de los movimientos humanos. ¿Os imagináis una realidad sin migrantes? ¿Es posible? Lo único que sé es que no es imposible.

A muchos les costará asimilar esta idea de la movilidad general, lo sé. Es difícil cambiar de perspectiva cuando vivimos rodeados de otra totalmente opuesta. Tenemos muy implantado e interiorizado el discurso político nacional e internacional de que todo lo ajeno a nuestro imaginario es una locura, una extrañeza. Lo que intento decir es que ver a los migrantes como personas que se mueven parece ser una locura. No debería ser así; deberíamos de crear nuestras realidades y no consumir las que nos crean, deberíamos salir de nuestro imaginario estado de bienestar y enfrentarnos a la vida por nosotros mismos. La idea del Estado de Bienestar (imaginario, porque nunca lo hemos llegado a experimentar) nos ha perturbado de tal manera que a veces nos sentimos incapaces de hacer cosas, de arriesgarnos: nos hemos hecho la idea de que todo se arreglará. Esto nos ha hecho dependientes del Estado, hasta tal punto de depender de las ayudas sociales, las ayudas de emergencia… culpamos al Estado de todo, algo de culpa tiene pero… ¿Y nosotros? Toda buena crítica debe empezar y acabar en una autocrítica.

Ante toda esta dependencia del Estado, encontramos a las personas que llegan a España y de otros países, las que migran y consiguen llegar. Estas personas son iguales que nosotros, pero muy diferentes a la vez. Los migrantes son el recuerdo vivo de nuestro pasado. Son personas que aún conservan las habilidades sociales que caracterizaban a las sociedades colectivistas: hospitalidad, aventura, optimismo, resiliencia, riesgo, abiertas, conformista,… esto, para algunos es retraso; para mí, avance.

La autonomía personal y la autocapacitación son rasgos que hemos ido perdiendo con el avance del desarrollo económico, cultural, político y social. Hemos estado cambiando y seguimos en continuo cambio. Pero, y siento decirlo, no estamos avanzando. Simplemente somos meros seguidores de un modelo social, cultural, político y económico, un modelo donde el último factor es el determinante de los demás factores: el dinero hace fluir lo demás. Y nosotros lo consumimos a diario.

Para algunos, esto es desarrollo: ser parte (aunque sea mero consumidor) del cambio. Como fieles consumidores en que nos convertimos, vemos los cambios provocados cuando ya se asientan, cuando forman parte de nuestra vida cotidiana. Vemos que no somos tan sociables cuando la tecnología es nuestra mejor compañía. Vemos que no somos independientes cuando nos sentimos incapaces de hacer algo por mejorar nuestra situación, o lo único que se nos ocurre es acudir al Estado para pedir ayuda.

Mi experiencia personal, como migrado que soy, me ha permitido experimentar el modelo del Estado de Bienestar Social y el modelo del Estado Social. Me reservaré mi experiencia para otro artículo. Solo quiero aportar que a los migrantes, cuando llegan a España, lo primero que les sorprende es el tipo de relaciones sociales que hay aquí, el individualismo y el rechazo social. Viniendo de Marruecos, un país colectivista donde se te trata como uno más, es difícil de sobrevivir en uno en el que apenas existes, en el que eres un número. Los migrantes sin redes sociales tienen la supervivencia casi imposibilitada; las redes sociales (familiares, amigos y/o conocidos) son un pie de apoyo fundamental en el desarrollo de la vida del nuevo vecino. La red social le acoge, le guía, le orienta… y le recuerda de donde viene.

¿Qué pretendo transmitir con este artículo? Que de los nuevos vecinos (extranjeros) también se puede aprender. Y mucho. Abrámonos a la sociedad. Seamos más sociables. Por su bien. Por nuestro bien. Por tu bien.

"La causa de la mayoría de los problemas de relaciones humanas

esta en la falta de reconocimiento mutuo"

Doménico Cieri Estrada (Escritor mejicano)

Comentarios

Las personas y las sociedades somos como los modelos de coches que tenemos en el mercado, cuando podemos comparar unos modelos antiguos con otros modelos que son recientes y nuevos.Observando la distancia entre la simpleza mecánica que se arreglaba a veces con un poco de cinta aislante, o con tornillos diferentes o con un trozo de alambre.Muy diferente de la sofisticada mecánica electrónica, que solo se diagnostica con una computadora, donde el mecánico viste una bata blanca.Con manos limpias de cirujano.Vemos el precio de la modernidad y del avance en todo lo que nos rodea.La distancia existente entre aquellos mercados al aire libre donde las personas se relacionaban de cerca, sin la fría separación de mostradores, ni de la asepsia.Las personas cercanas.Hoy en las sociedades modernas, nadie se saluda por la calle, amarrados al reloj, al teléfono o al desplazamiento a los trabajos para no llegar tarde.Todo el mundo en silencio.Cada cual a lo suyo, encerrados en su mundo interior y con la puerta cerrada con un libro delante de los ojos rodeados de frases cortas.Perdón, lo siento, me permite, gracias, excuse, O.K.Hablando sin ninguna implicación, ausentes, ajenos y fríos hasta para dar la hora.Como autómatas.Es el precio del rendimiento, de la rentabilidad por la que se cobran los salarios, el tiempo que se tarda en respirar que también vale dinero.Sufriendo las personas enfermedades de soledad, de todo tipo de ansiedades y de alergias.Traspasando nuestra humanidad a las máquinas, que nos están robando el terreno, y la amabilidad.Siendo educados solo los artefactos que producimos en serie, como los coches que hablan a los conductores mientras éstos leen el periódico.Mientras se aparcan solos.El avance tecnológico es un retroceso social que nos hace cada vez más parecidos a las máquinas, que de seguir por este camino un día no lejano nos quitarán el sitio.Volviendo a la caverna de nuevo.
totalmente de acuerdo contigo San Mateo! ;)
Yo tambien, lindo, San Mateo!
Las personas y las sociedades somos como los modelos de coches que tenemos en el mercado, cuando podemos comparar unos modelos antiguos con otros modelos que son recientes y nuevos.Observando la distancia entre la simpleza mecánica que se arreglaba a veces con un poco de cinta aislante, o con tornillos diferentes o con un trozo de alambre.Muy diferente de la sofisticada mecánica electrónica, que solo se diagnostica con una computadora, donde el mecánico viste una bata blanca.Con manos limpias de cirujano.Vemos el precio de la modernidad y del avance en todo lo que nos rodea.La distancia existente entre aquellos mercados al aire libre donde las personas se relacionaban de cerca, sin la fría separación de mostradores, ni de la asepsia.Las personas cercanas.Hoy en las sociedades modernas, nadie se saluda por la calle, amarrados al reloj, al teléfono o al desplazamiento a los trabajos para no llegar tarde.Todo el mundo en silencio.Cada cual a lo suyo, encerrados en su mundo interior y con la puerta cerrada con un libro delante de los ojos rodeados de frases cortas.Perdón, lo siento, me permite, gracias, excuse, O.K.Hablando sin ninguna implicación, ausentes, ajenos y fríos hasta para dar la hora.Como autómatas.Es el precio del rendimiento, de la rentabilidad por la que se cobran los salarios, el tiempo que se tarda en respirar que también vale dinero.Sufriendo las personas enfermedades de soledad, de todo tipo de ansiedades y de alergias.Traspasando nuestra humanidad a las máquinas, que nos están robando el terreno, y la amabilidad.Siendo educados solo los artefactos que producimos en serie, como los coches que hablan a los conductores mientras éstos leen el periódico.Mientras se aparcan solos.El avance tecnológico es un retroceso social que nos hace cada vez más parecidos a las máquinas, que de seguir por este camino un día no lejano nos quitarán el sitio.Volviendo a la caverna de nuevo.
totalmente de acuerdo contigo San Mateo! ;)
Yo tambien, lindo, San Mateo!

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