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Agadez, en Níger: kilómetro cero de la inmigración

Alentados por las historias de otros que sobrevivieron al peligroso viaje, miles de migrantes africanos cruzan Níger en camionetas atestadas rumbo a Europa a través de Libia, donde el colapso del Gobierno ha dejado la puerta abierta a los contrabandistas. Agadez, una antigua ciudad comercial al borde del Sahara, es el punto de salida de esta incierta travesía

  • Un grupo de migrantes y sus pertenencias se apiñan en un camión con destino a Europa. Parten de la ciudad nigerina de Agadez, kilómetro cero de las rutas de migrantes africanos que sueñan con alcanzar el viejo continente. Para ello, primero tendrán que alcanzar Libia, donde el desgobierno reinante tras la caída del dictador Gadafi ha facilitado el trabajo a contrabandistas y traficantes de personas.
    1Un grupo de migrantes y sus pertenencias se apiñan en un camión con destino a Europa. Parten de la ciudad nigerina de Agadez, kilómetro cero de las rutas de migrantes africanos que sueñan con alcanzar el viejo continente. Para ello, primero tendrán que alcanzar Libia, donde el desgobierno reinante tras la caída del dictador Gadafi ha facilitado el trabajo a contrabandistas y traficantes de personas. REUTERS
  • Un grupo de migrantes sentados en la parte trasera de un camión, justo antes de salir de viaje a través del desierto.
    2Un grupo de migrantes sentados en la parte trasera de un camión, justo antes de salir de viaje a través del desierto. REUTERS
  • Nassirou, inmigrante de 19 años natural de Nigeria, lleva un turbante para protegerse del polvo durante la travesía a través del desierto en uno de los camiones repletos de africanos como él que quieren llegar a Europa.
    3Nassirou, inmigrante de 19 años natural de Nigeria, lleva un turbante para protegerse del polvo durante la travesía a través del desierto en uno de los camiones repletos de africanos como él que quieren llegar a Europa. REUTERS
  • Inmigrantes en situación irregular esperan para subirse a un autobús que les llevará desde la ciudad de Niamey, en Níger, hasta Agadez.
    4Inmigrantes en situación irregular esperan para subirse a un autobús que les llevará desde la ciudad de Niamey, en Níger, hasta Agadez. REUTERS
  • Migrantes de Burkina Faso sebajan de un autobús a su llegada a la ciudad de Agadez, en el desierto nigerino.
    5Migrantes de Burkina Faso sebajan de un autobús a su llegada a la ciudad de Agadez, en el desierto nigerino. REUTERS
  • Un hombre camina por delante de una pizzería en la ciudad de Agadez, al borde del desierto del Sáhara y una de las más pobres de Níger, que a su vez es el país más pobre del mundo.
    6Un hombre camina por delante de una pizzería en la ciudad de Agadez, al borde del desierto del Sáhara y una de las más pobres de Níger, que a su vez es el país más pobre del mundo. REUTERS
  • Nassirou, nigeriano de 19 años, posa en Agadez. Desde que mil inmigrantes se ahogaran en el Mediterráneo en el mes de abril, se ha agudizado la atención internacional en el fenómeno migratorio y en la inseguridad que sufren las personas que inician el camino hacia Europa.
    7Nassirou, nigeriano de 19 años, posa en Agadez. Desde que mil inmigrantes se ahogaran en el Mediterráneo en el mes de abril, se ha agudizado la atención internacional en el fenómeno migratorio y en la inseguridad que sufren las personas que inician el camino hacia Europa. REUTERS
  • Bouso Mammadou, de 24 años y natural de Nigeria, posa para un retrato en Agadez, ciudad de tránsito de los migrantes africanos en su periplo hacia Europa. La mayoría de los jóvenes que emprenden este viaje escapan de la pobreza en la que viven en sus países, como Burkina Faso o Benín.
    8Bouso Mammadou, de 24 años y natural de Nigeria, posa para un retrato en Agadez, ciudad de tránsito de los migrantes africanos en su periplo hacia Europa. La mayoría de los jóvenes que emprenden este viaje escapan de la pobreza en la que viven en sus países, como Burkina Faso o Benín. REUTERS
  • Seidou, nigeriano de 19 años, posa para un retrato en Agadez. Los migrantes que emprenden el camino hacia Europa se enfrentan a numerosos peligros durante su viaje: bandidos, sobornos por parte de autoridades locales y contrabandistas son habituales en su lucha diaria.
    9Seidou, nigeriano de 19 años, posa para un retrato en Agadez. Los migrantes que emprenden el camino hacia Europa se enfrentan a numerosos peligros durante su viaje: bandidos, sobornos por parte de autoridades locales y contrabandistas son habituales en su lucha diaria. REUTERS
  • Sanoussi, migrante de 28 años.
    10Sanoussi, migrante de 28 años. REUTERS
  • Un clérigo enseña a un grupo de alumnos en una escuela islámica cercana al mercado central de la ciudad de Agadez.
    11Un clérigo enseña a un grupo de alumnos en una escuela islámica cercana al mercado central de la ciudad de Agadez. REUTERS
  • Chanclas junto a la puerta de la escuela islámica de Agadez, donde se debe entrar descalzo.
    12Chanclas junto a la puerta de la escuela islámica de Agadez, donde se debe entrar descalzo. REUTERS
  • Un hombre repara un aparato eléctrico en su tienda, en el mercado central de Agadez.
    13Un hombre repara un aparato eléctrico en su tienda, en el mercado central de Agadez. REUTERS
  • El alcalde de Agadez, Rhissa Feltou, posa para una fotografía en su despacho.
    14El alcalde de Agadez, Rhissa Feltou, posa para una fotografía en su despacho. REUTERS
  • Una niña camina por delante de un montón de ramas que serán utilizadas para la construcción de viviendas en Agadez.
    15Una niña camina por delante de un montón de ramas que serán utilizadas para la construcción de viviendas en Agadez. REUTERS
  • Tres migrantess de Benín duermen sobre unas alfombras en Agadez mientras esperan a que haya algún vehículo disponible para empezar su viaje a través del desierto con destino a Libia.
    16Tres migrantess de Benín duermen sobre unas alfombras en Agadez mientras esperan a que haya algún vehículo disponible para empezar su viaje a través del desierto con destino a Libia. REUTERS
  • Una imagen del emblemático minarete de Agadez, pintado en la puerta de un edificio en esta ciudad desértica.
    17Una imagen del emblemático minarete de Agadez, pintado en la puerta de un edificio en esta ciudad desértica. REUTERS
  • Un hombre permanece sentado sobre su motocicleta en el mercado central de Agadez.
    18Un hombre permanece sentado sobre su motocicleta en el mercado central de Agadez. REUTERS
  • Baroo, inmigrante de 19 años, posa para un retrato en Agadez.
    19Baroo, inmigrante de 19 años, posa para un retrato en Agadez. REUTERS
  • Naossirou, migrante de 18 años, posa para un retrato.
    20Naossirou, migrante de 18 años, posa para un retrato. REUTERS
  • Un grupo de migrantes hace cola para subir a uno de los camiones que les llevarán a través del desierto.
    21Un grupo de migrantes hace cola para subir a uno de los camiones que les llevarán a través del desierto. REUTERS
  • Un grupo de migrantes observa cómo un hombre coloca sus cosas en la parte trasera de un camión con el que, previsiblemente, iniciará su viaje a través del desierto.
    22Un grupo de migrantes observa cómo un hombre coloca sus cosas en la parte trasera de un camión con el que, previsiblemente, iniciará su viaje a través del desierto. REUTERS
  • Un migrante sentado en la parte trasera de un camión sostiene una garrafa de agua en vuelta en un paño húmedo para evitar que se caliente.
    23Un migrante sentado en la parte trasera de un camión sostiene una garrafa de agua en vuelta en un paño húmedo para evitar que se caliente. REUTERS
  • Los migrantes que emprenden su ruta por el desierto llevan estas imprescindibles garrafas de agua envueltas en trapos húmedos.
    24Los migrantes que emprenden su ruta por el desierto llevan estas imprescindibles garrafas de agua envueltas en trapos húmedos. REUTERS
  • Un migrante se cambia de zapatos mientras se prepara para subir a un camión en la ciudad de Agadez.
    25Un migrante se cambia de zapatos mientras se prepara para subir a un camión en la ciudad de Agadez. REUTERS
  • Mounssirou Alassaane, de 17 años, trabajaba como sastre en su país, Benín, antes de decidirse a emigrar.
    26Mounssirou Alassaane, de 17 años, trabajaba como sastre en su país, Benín, antes de decidirse a emigrar. REUTERS
  • Ismael Fousseni, de 16 años, es de Benín.
    27Ismael Fousseni, de 16 años, es de Benín. REUTERS
  • Idriss Alassaane, de 15 años, era aprendiz de mecánico en Benín.
    28Idriss Alassaane, de 15 años, era aprendiz de mecánico en Benín. REUTERS
  • Las luces de un vehículo iluminan las piernas de los migrantes sentados en la parte trasera de un camión que atraviesa una polvorienta carretera rumbo al desierto. Es noche cerrada, atrás ha quedado la ciudad nigerina de Agadez, kilómetro cero de las rutas de migrantes africanos que sueñan con alcanzar Europa. Para ello, primero tendrán que alcanzar Libia, donde le desgobierno reinante tras la caída del dictador Gadafi ha facilitado el trabajo a contrabandistas y traficantes de personas.
    29Las luces de un vehículo iluminan las piernas de los migrantes sentados en la parte trasera de un camión que atraviesa una polvorienta carretera rumbo al desierto. Es noche cerrada, atrás ha quedado la ciudad de Agadez. REUTERS