_
_
_
_
Blogs / Cultura
Del tirador a la ciudad
Coordinado por Anatxu Zabalbeascoa

Activar un edificio

Anatxu Zabalbeascoa

Los arquitectos de Paisaje Transversal trabajan con dos extremos. Por un lado, lo aparentemente menos importante: los restos, lo que está ya construido y presenta graves problemas. Por otro, lo fundamental: las personas y sus anhelos. Lo curioso es lo que consiguen sacar de ese diálogo entre opuestos.

En Náquera (Valencia) partieron de un edificio ya levantado que debía servir para todo (Centro Multiusos) y, que, sin embargo y como tantos, terminó por no servir para (casi) nada. Hasta allí viajaron los arquitectos de este colectivo para tratar de averiguar qué pasaba antes de decidir cómo se le podía inyectar vida al inmueble vacío. La “dinamización del edificio” –así llaman a este tipo de reparación- se inició con una consulta, “un proceso de participación ciudadana”. La propuesta de los arquitectos remite al modelo de gestión comunitaria en el que los ciudadanos proponen y desarrollan actividades en el centro.

Los cinco proyectistas de Paisaje Transversal creen que el abandono de muchas de las nuevas construcciones levantadas durante la burbuja inmobiliaria ha provocado, además de (más) desconfianza hacia los políticos, el rechazo hacia estos nuevos equipamientos convertidos en monumentos a la impericia. Por eso sostienen que ha llegado el momento de abordar este problema. Con el proyecto Naquerant Espais intentan encontrar vías que permiten dotar de un uso a estas infraestructuras infrautilizadas “sin necesidad de realizar grandes inversiones económicas y situando al ciudadano en una posición central, con capacidad de decisión”. 

El proceso colaborativo, “creador de programas, y generador de identidad”, analizó en Náquera las necesidades ciudadanas de servicios, espacios y actividades al tiempo que valoró las capacidades de los ciudadanos dispuestos a implicarse, impulsar o apoyar la puesta en marcha de esas actividades en los 3000 m2 de un inmueble de cuatro plantas levantado en 2010 y que, tres años después, solo tenía ocupada la segunda con la biblioteca del pueblo.

El entonces concejal de urbanismo apoyó la investigación y la participación ciudadana reveló el deseo de una serie de actividades encabezadas por “arte y creatividad”, explica Jon Aguirre de Paisaje Transversal, entre las que caben desde pintura hasta cocina pasando por exposiciones y medio ambiente (el pueblo está junto a la Sierra Calderona, que es parque natural).

Más allá de canalizar esos anhelos, los arquitectos pidieron ayuda a los 6.000 habitantes del pueblo para cambiar la imagen del centro. Más de 150 ciudadanos ofrecieron su colaboración y juntos buscaron una impresión “dinámica, colaborativa, joven, capaz de construir una nueva identidad para el centro a partir de tres acciones colectivas: «graffitiacción», «reciclacción» y «jardinacción”, cuentan. La primera acción ya se ha desarrollado. Es la que presentamos en este post. Para la segunda confían en reciclar no solo partes del edificio y elementos para su mobiliario, también profesionales y ciudadanos: un consejo cultural –que combine gestión del Ayuntamiento con gestión ciudadana- podría supervisar la nueva vida de este inmueble para el que los ciudadanos y los arquitectos de Paisaje Transversal han redactado un borrador con estatutos para 65 actividades, 24 de ellas anuales.

Las conclusiones del colectivo de arquitectos son que “en todo núcleo poblado existe una masa crítica ciudadana capaz de invertir el esfuerzo necesario para apoyar el aprovechamiento del patrimonio público”. Y las consecuencias de esas conclusiones ¿amplían o empobrecen el papel del arquitecto?

Coste del proceso iniciado en Náquera: menos del 0,2 % del presupuesto invertido en la ejecución del edificio (9 millones de euros), según arquitectos.

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
Recíbelo

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_