_
_
_
_
Blogs / Cultura
Del tirador a la ciudad
Coordinado por Anatxu Zabalbeascoa

La historia en abstracto

Anatxu Zabalbeascoa

FOTO: Fernando Alda 

Extramuros, junto a la muralla de Conil de la Frontera, en Cádiz, la historia habla un idioma abstracto en la rehabilitación de tres viviendas y una calle que, sin reclamar protagonismo, contribuyen a construir la ciudad a partir de los materiales, la escala y el carácter discreto de la tradición popular. Esos mismos atributos describen, a su vez, los fundamentos de la arquitectura moderna.

El arquitecto Sebastián de Alba buscó enfatizar esos valores de la abstracción que encuentra paralelismos entre el origen de la tradición arquitectónica moderna y la naturaleza de la construcción local y popular. Así, lo neutral, o el paso atrás, se convirtió aquí en una forma de respeto hacia la historia y hacia la memoria, y, a la vez, en una manera de dar valor la cultura de la ciudad.

Una exigencia de la Delegación Provincial de Cultura lo puso fácil. Solicitaban el soterramiento de todas las instalaciones vistas que discurrían por la fachada del edificio a rehabilitar y cruzaban a las calles colindantes. Sin cables ganaba la abstracción. También eliminando ruidos visuales y acústicos en las calles que los arquitectos reconquistaron para los peatones (por orden del ayuntamiento) se reforzaba la idea de la limpieza sin ornamentos moderna. Así, las viviendas y la plaza ahora miran al mar. Pero también se ven desde el mar, limpias y sólidas.

Para sumarse al lugar, más allá de dar un paso atrás, el edificio utiliza el mismo tipo de granito gris y con el mismo formato que el empleado en la pavimentación de la calle. La continuidad la ampara el silencio, pero también los pequeños gestos. Tal vez por eso, los proyectistas atribuyen a la intervención una “vocación lingüística” por la manera en que se ocupa de mantener el diálogo entre las partes. También hablan de conciliación y de filiación genética, para definir el arraigo y la buena convivencia

Así, los rasgos más abstractos, que son también los más neutros, permanecen junto a la tradición de los patios, aquí concatenados. La rehabilitación ha sustituido en las viviendas los planos horizontales por losas de hormigón visto que revelan otra forma de construir un mismo idioma esquemático, fundamental y desnudo que mantiene para las fachadas el valor de la proporción y la relación entre vacíos y macizos.

Las tres viviendas dúplex se alojan en la crujía formada por los muros de las fachadas y los muros de los dos patios concatenados y conectados, a través de un zaguán, al espacio que ocupa la escalera comunitaria. Esta vía de acceso conduce a la terraza de la primera planta y a la azotea, donde está el solárium, pero hay otros accesos: a cada vivienda se llega desde un punto distinto en el espacio común de los patios.

Por dentro, las viviendas son espacios diáfanos y continuos. En la planta baja, la cocina está en un plano algo más elevado que la sala de estar. La primera aloja la zona privada de dormitorios y baño.

La paleta de los materiales es “escasa y noble”, apuntan los arquitectos: revoco de mortero de cal, granito gris, caliza blanca, hormigón blanco visto, madera lacada blanca, carpintería de aluminio anodizado en acero inoxidable y contraventanas correderas de chapa de acero galvanizado termolacado en blanco que, cuando están cerradas, subrayan el carácter abstracto de los edificios.

Coste por m2 de ejecución material de la rehabilitación, según los arquitectos: 809,26 €/m2.

Comentarios

La composicion de la fachada de la "carniceria", incluso con los trastos y los cables es "abstracta". Fuimos alguna vez modernos? Aun asi me gusta, porque soy un viejo "moderno"..Porque nunca ( casi nunca) publica los planos?
No me he enterado de mucho. Soy un burro. Me ha sonado como a la descripción de las evocaciones de un vino explicadas por un experto. No sé. Es como el entorno, ¿no? Muy bien, porque es bonito, funcional y no desentona. Le encargan eso al arquitecto municipal o a otro del pueblo y haría algo parecido. Tampoco veo que construir con los materiales, la escala y el carácter discreto de la tradición popular sean los fundamentos de la arquitectura moderna, antes al revés. Ojalá fuera así. Los cables en la fachada de la carnicería no están escondidos, así que no sé qué se ha soterrado. El granito gris tampoco lo veo en el edificio, no sé si es problema de vista o de entendederas. La obra me gusta, pero con el texto no he podido. ¡Ah! También me hubiera gustado ver los planos.
¿Puede ser que la carnicería no sea parte de la rehabilitación y que al granito gris lo hayan encalado?
la carnicería está en el edificio medianero... por cierto, en la misma, venden una ternera retinta muy estimable
Hola Iznogood y JoseSiempre pido los planos. A veces los consigo y otras no. Como el blog consume bastante, no puedo esperar eternamente. En este caso, sí me los pasaron, pero el formato no era compatible con el blog. Estuve tratando de transformarlos, pero no fui capaz. Se agradece la atención. Saludos cordiales.
Saludos y gracias por el blog
También estoy agradecido por el blog. No me lo pierdo pero a veces lo tengo que leer en dos minutos y no me entero de cosas evidentes. Gracias también a barriguitas, porque tengo que ir a Conil y la medianera retinta no me la pierdo. En las fachadas no hay ni un reborde, así que los aviones no pueden hacer sus nidos y eso está bien porque el guano ácido y la cal básica casan mal. Ahora, que yo hubiera puesto unas troneras para que nidificasen los vencejos, que esos no lo dejan todo lleno de cagarrutas. Los nidos de vencejos en una plaza son lo más. Por las tardes se ponen todos a volar en círculos muy rápido y piando como el demonio, mientras suben en espiral muy poco a poco para irse a dormir sobre las nubes. Ese piar en una plaza empieza por Conil hacia la segunda mitad de abril y es el reloj que dice que empezó el buen tiempo y esto ya está siendo en plan Juhani Pallasmaa.
Tienes razon Jose, la Arquitectura es una cosa demasiado seria como para dejarsela a los arquitectos...Lo mismo digo de los carniceros y de los ornitologos....

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_