No incentiven los asentamientos

(...) Desde 2009, cuando el primer ministro, Benjamín Netanyahu, decidió incluir asentamientos aislados de Cisjordania entre las comunidades que cumplen los requisitos para recibir ayudas del Gobierno, la presencia de los asentamientos en la lista ha ido en aumento. De 20 nuevas comunidades añadidas por el Gabinete este domingo, nueve son asentamientos en Cisjordania. (...) Entre ellos están Eshkolot y Neguhot en las colinas meridionales de Hebrón, así como Rehalim, Sansana y Bruchin, hasta hace pocos meses considerados puestos de avanzada ilegales, y que el Gobierno regularizó antes de las elecciones parlamentarias de enero.

Ocho años han transcurrido desde que el Gobierno prometió a EE UU que no incentivaría el desarrollo de asentamientos, tres semanas desde que la UE anunció sanciones contra instituciones israelíes vinculadas a los asentamientos y cerca de dos semanas desde el anuncio del reinicio de las negociaciones de paz entre Israel y los palestinos. Y ahora el Gobierno, dejándose llevar por el partido Casa Judía (Habayit Hayehudi) y la facción proasentamientos del Likud, está mostrando su verdadero rostro y sus prioridades. Los asentamientos se han convertido en una empresa de máxima importancia nacional, con derecho a desviar recursos del Estado, y por encima de cualquier otro sector en el país.

El propio Gobierno reconoce que estos asentamientos fueron añadidos a la lista contraviniendo la legislación. (...) En lugar de distorsionar la ley al alentar el desarrollo de asentamientos en Cisjordania mediante incentivos financieros, el Gobierno debería retirarlos de la lista de zonas prioritarias.

Tel Aviv, 5 de agosto