Colada ecológica y pelotas de golf
- Llenar el tambor de la lavadora hasta su capadidad máxima
- Evitar el prelavado siempre que sea posible
- Seleccionar un programa corto de lavado y a temperatura fría. La mayor parte de la energía que consume la lavadora, entre el 80 y el 85%, se utiliza para calentar el agua, por lo que es muy importante lavar, siempre que se pueda a temperaturas bajas.
- Ajustar la dosis de detergente según la dureza del agua. Un agua blanda necesita menos detergente que una dura. Además, una dosificación adecuada reduce la cantidad de jabón vertida al medio ambiente. Por el contrario, si se echa detergente en exceso se produce mucha espuma que hace trabajar innecesariamente al motor de la lavadora además de contaminar.
- Poner en marcha la lavadora por la noche en caso de tener contratada la tarifa nocturna.
- En caso de avería y de no poder arreglarla, comprar una lavadora de eficiencia energética.
- Llenar el tambor de la lavadora hasta su capadidad máxima
- Evitar el prelavado siempre que sea posible
- Seleccionar un programa corto de lavado y a temperatura fría. La mayor parte de la energía que consume la lavadora, entre el 80 y el 85%, se utiliza para calentar el agua, por lo que es muy importante lavar, siempre que se pueda a temperaturas bajas.
- Ajustar la dosis de detergente según la dureza del agua. Un agua blanda necesita menos detergente que una dura. Además, una dosificación adecuada reduce la cantidad de jabón vertida al medio ambiente. Por el contrario, si se echa detergente en exceso se produce mucha espuma que hace trabajar innecesariamente al motor de la lavadora además de contaminar.
- Poner en marcha la lavadora por la noche en caso de tener contratada la tarifa nocturna.
- En caso de avería y de no poder arreglarla, comprar una lavadora de eficiencia energética.
Así que mi marido se fue de compras a una tienda ecológica del barrio para volver a casa pertrechado con varias bolsas llenas a rebosar. Fue vaciándolas una a una y colocando sobre la mesa de la cocina varios productos que no supe identificar: unos polvos aquí, una latá allí, más allá un paquete informe, y al final extrajo del fondo de la última bolsa una malla negra llena de ¿pelotas de golf?
- ¿Y esto? - pregunté con la voz, con la mirada y con un dedo claramente acusadores. No me atreví a pronunciar la palabra "pelota" ni mucho menos "golf".
- Es para la colada, claro - Y me alargó un libro abierto por una página donde pude leer: "La suciedad se va en la lavadora por la acción mecánica (el tambor que da vueltas), por el agua caliente, y por el uso de productos químicos, y a menudo es por la combinaciónn de los tres factores. Si se quieren reducir los productos químicos hay que aumentar uno de los otros factores. Las bolas de lavado o en su defecto las de golf o las de tenis - seguí leyendo- permiten lavar más a fondo la ropa al estilo de las antiguas lavanderas, a golpes puros y duros."
Le devolví el libro algo aliviada. Podría haber sido peor. Podría haber comprado pelotas de tenis.
- No quedaban bolas de lavado -me susurró cabizbajo en un tono que sonó a disculpa.
Recordaré siempre ese verano por el calor asfixiante, que nos obligaba a abrir ventanas y disfrutar así sin mesura del alegre zumbido de los aires acondicionados vecinos. Y también por el ruido atronador que salía de nuestra lavadora cada vez que mi marido hacía la colada. Y es que en el tambor se organizaba una auténtica mascletá, ríete tú de las Fallas de Valencia. Eso sí, a golpes maestros de golf. Esos meses de canícula aumentamos en varios decibelios la contaminación acústica del vecindario pero contaminamos el agua mucho menos. Llegó el fin del verano, el brote de activismo se fue diluyendo, y la mente, las manos y el tiempo de mi marido volvieron a estar muy ocupados, tanto que las bolas de golf quedaron relegadas en un rincón. Casi echo de menos la sinfonía atonal que componían en la lavadora. Cada vez que las veo tan tristes y solas me pregunto si no deberíamos utilizarlas de nuevo. Y tú, ¿qué harías?
Más información sobre cómo hacer una colada ecológica y sobre qué son las bolas de lavado para lavar la ropa.
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