Bardem y el Sáhara

Enhorabuena a Javier Bardem por su Goya al mejor documental, otorgado a Hijos de las nubes,un buen trabajo sobre el largo conflicto del Sáhara Occidental. Creo que todos los que estamos a favor de la causa saharaui, por un mínimo de responsabilidad histórica y de humanidad, debemos agradecerle su implicación y su generosidad, ya que acciones como esta dan visibilidad a este conflicto tantas veces olvidado. Sin embargo, quiero poner algún “pero” a su intervención en la ceremonia de los Goya.

Es cierto que en los campamentos de refugiados del Sáhara, donde muchas cosas faltan y nada sobra, no se puede recortar… pero no es cierto que no haya hospitales ni escuelas. Precisamente, uno de los grandes méritos del exilio saharaui ha sido el impresionante esfuerzo que se ha hecho en materia de sanidad y educación, gracias a la solidaridad de muchas familias, organizaciones e instituciones españolas y a pesar de las inmensas dificultades que han encontrado en el camino.

En sucesivas visitas a los campamentos he podido comprobar cómo, año tras año, mejoraban los hospitales y dispensarios a los que acuden regularmente grupos de médicos y sanitarios voluntarios que prestan desinteresadamente su ayuda… Lo mismo puedo decir de los colegios. A día de hoy, los niños saharauis están escolarizados en la práctica totalidad desde los tres años y hasta finalizar la primaria. En el momento actual han sido capaces de levantar también algunos centros de secundaria más que dignos, centros de educación especial y también otros para la formación de las mujeres saharauis. Existe incluso el proyecto de crear una universidad en el desierto. Un esfuerzo impresionante por la educación y la sanidad del que muchos de nuestros políticos podrían tomar buena nota.

En cualquier caso, reitero mi felicitación a Bardem y Longoria por su buen trabajo y su generosidad.— Francisco Fernández Santamaría.