La violencia contra la mujer
Cuando se piensa en violencia contra la mujer se focaliza en violencia física, pero también está la violencia del color rosa: ¿Por qué las estanterías de ropa para niñas están invadidas de rosa? ¿Es el único color afín a su naturaleza? Le sigue la violencia contra las chicas decididas. ¿Por qué no se fomenta en las niñas la ambición? ¿Por qué cuando una mujer asciende se mide todo en ella, desde su vida personal a su estilo, sus “cargas familiares”, etcétera? También tenemos la violencia del verbo “sacrificarse”: sacrifícate por tus hermanos, tus hijos, la familia… para mantener esta sociedad y su sistema. Siguiente acto violento, el del cuerpo que debe mantener joven para no ser relegada. Y ¿por qué siendo las mujeres las que educan, todas estas formas de violencia se repiten? Porque educar es arriesgado y no se les enseña a arriesgar, sino a seguir un patrón. De este modo, aún hoy, lo femenino continúa sin mostrar su realidad todos los días, no solo el 25 de noviembre, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.— Natividad Lara Cepeda.
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