Grandes hermanos
"Lo que pretendía el obispo Reig con su homilía de Viernes Santo era vendernos su moto, llegar a 'trending topic' y liarla púrpura. La culpa es nuestra por comprársela"
No sé por qué le dan tanto bombo a Dolores de Cospedal por salir de costalera en Semana Santa con el Cristo de la Caridad a hombros. Yo también me llevo a cuestas esta columna todos los puentes de Dios y nadie me echa cuenta. Cada una tiene sus cruces y sus penitencias y se debe a su público y sus señoritos. Que conste que no es por criticarla, ni a ella ni a su credo, aquí hay para todos. Acuérdate de Bono cuando presidíala procesión del Corpus más chulo que Espartaco el del péplum, para mí que si no se ponía la mantilla y la peineta era porque aún no había descubierto Svenson y no tenía dónde agarrarlas. Ahora que, para hombre espectáculo y gladiador de su causa, el obispo de mi pueblo.
Sí, qué pasa, soy alicantina y residente en Alcalá de Henares, como Juan Antonio Reig, el mandamás de mi diócesis, ¿o acaso no puede una vivir en la periferia y estar en la pomada? Para mí que eso precisamente es lo que pretendía Reig con su homilía de Viernes Santo. Vendernos su moto, llegar a trending topic y liarla púrpura. La culpa es nuestra por comprársela. Que es antiabortista y homófobo a rabiar lo saben hasta los negros, que decía mi abuela, los dichos de antes sí que eran bestias. Su ilustrísima vio su minuto de gloria en el piloto de la cámara de Televisión Española y se vino él solito arriba como una ola, que cantaba la Jurado. Vale que no es muy cristiano ladrar ni echar espuma por la boca contra el prójimo, pero La 2 está especializada en documentales de flora y fauna ibérica, no sé de qué nos extrañamos tanto.
En cuestión de príncipes de la Iglesia, mi colega Karmentxu Marín y servidora somos más de monseñor Xavier Novell, el obispo de Solsona y el reverendísimo más joven –y mejor plantado– de España. Será igual de católico, apostólico y romano que mi paisano, pero ha tenido el gesto de bajarse el sueldo por la crisis y además, con el debido respeto, Su Eminencia está que cruje. Te lo digo yo, que una vez le puse los gemelos de la camisa, no me preguntes cómo ni cuándo, y aún no me he repuesto del sofoco.
Hablando de especímenes patrios, Jessica Bueno y Kiko Rivera vuelven a estar embarazados. Dos cigotos en cuatro meses: la de estos chicos es una relación fértil y no la de Adán y Eva. Si hubiera violencia estructural contra las futuras madres, como dijo el ministro Gallardón en sede parlamentaria, Jessi sí sería una antisistema y no Marine Le Pen, que tanto presume de ir a la contra en las presidenciales francesas.
Parece que la parejita tenía apalabrada la exclusiva del bombo en ¡Hola!, pero eso fue antes de que se la destripara Mercedes Milá en Gran Hermano. Pues sí hombre, apaños a ella, que le sacó al futuro Nobel Camilo José Cela que absorbía litro y medio de agua por el orto, y sin emolumentos por medio, eran otros tiempos. Últimamente, la Milá está que se sale. El otro día enseñó el pandero urbi et orbe, y qué: ella puede. Para eso es una comunicadora con 30 años de oficio a la chepa y las demás, pardillas. Si tiene que
arremangarse a luchar en el fango rosa, descuida, que no se le caen los anillos ni pone carita de asco como otras. Y no miro a nadie, Susanna.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.