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Bienvenidos a las fiestas de Warhol

El Whitney Museum y el MoMa recuperan las películas que grabó el icono del arte pop y que reflejan la vida de la Factoría en las que aparecen desde Dennis Hopper, Lou Reed, David Bowie, Mick Jagger a Bob Dylan

Andy Warhol con Jane Holzer, en 1969
Andy Warhol con Jane Holzer, en 1969CORDON

Por primera vez desde la muerte de Andy Warhol del mayor icono del arte pop, hace 25 años, sus más importantes películas han sido restauradas, algunas de ellas perdidas para el público desde el momento de su estreno, en los años de la célebre Factoría de Nueva York. Muchas de ellas son sus largometrajes más célebres, como Sleep, de 1963, un plano secuencia de 321 minutos de duración que muestra al artista John Giorno durmiendo. Otras son simples pruebas de cámara, momentos improvisados con actores como Dennis Hopper o cantantes como Lou Reed.

Ahora, uno de los mayores estudiosos de Warhol en Estados Unidos se ha propuesto llevar esas películas a España, de la mano de PhotoEspaña. “Son películas muy inusuales. Warhol experimentaba mucho con el medio cinematográfico, nunca se adhería a un solo estilo o una forma de hacer las cosas. Son especialmente interesantes las pruebas de cámara, que carecen de sonido, con todo tipo de actores, sin mostrar en realidad ninguna narrativa”, explica el profesor de historia del arte de la Universidad de Rochester Douglas Crimp, que ha publicado recientemente el libro "Our Kind of Movie": The Films of Andy Warhol,y que ha coordinado la muestra fílmica, con 33 proyecciones.

La Factoría nació en Manhattan en 1963. Warhol alquiló una vieja fábrica de sombreros, la cubrió de pintura plateada y papel de aluminio y, durante cinco años, se dedicó a grabar películas con una cámara Bolex primero y una Auricon después. Produjo unas 650 películas, la mayoría pruebas de cámara, retratos con movimiento y sin sonido. Los largometrajes eran, cada uno, un mundo distinto y una provocación totalmente nueva. Empire, de 1964, dura 485 minutos y muestra un plano fijo del famoso rascacielos Empire State Building en Nueva York.

Por la Factoría pasaron todo tipo de personajes, algunos célebres por derecho propio y otros que se harían famosos debido precisamente a su tránsito circunstancial por aquel espacio de bacanales creativas. Entre los primeros se encontraban David Bowie, Mick Jagger, Bob Dylan o Truman Capote. Entre los segundos, viejas glorias de un Nueva York ya olvidado, como Jose Dallesandro, Johnny Conflict, Rotten Rita o Ultra Violet.

Warhol, siempre impredecible, retiró las películas de distribución en los años 70. Según explica el profesor Crimp: “Durante más de dos décadas, ni el público en general ni los estudiosos de su obra pudimos ver esos filmes. A muchos de ellos los conocíamos de oídas, simplemente, por lo que habíamos oído de ellos. Eran mitos que ahora podemos ver y analizar”. Antes de morir, el artista dio permiso al Whitney Museum y al Museum of Modern Art (MoMA) para que los restauraran y los volvieran a poner en circulación. El proceso ha durado 25 años.

En la exposición propuesta a PhotoEspaña, el profesor Crimp ha unido pruebas de pantalla y los largometrajes correspondientes a ellas, para ofrecer una visión de conjunto de cómo producía Warhol sus obras fílmicas. Entre las obras seleccionadas se halla Blow Job, de 1964, que muestra la cara de DeVeren Bookwalter mientras le practican una felación, algo que en 1991 homenajearían el director Gus Van Sant y el actor River Phoenix en Mi Idaho privado.

Los 25 años de la muerte de Warhol están dando para muchos homenajes. Uno de los más inspirados ha sido el de un artista a la altura de las circunstancias, Jim Sharman, director de la obra teatral y la película The Rocky Horror Picture Show, de 1975, cumbre atemporal del kitsch. El día y la hora exactos de la muerte de Warhol, el 22 de febrero a las 6:21 de la mañana, hora de Nueva York, estrenó en Internet Andy X, un pastiche artístico de homenaje a Warhol, con fragmentos de cabaret, performances artísticas y, como no, pruebas de cámara.

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