Un desconocido guitarrero llamado Richard Gere
El actor recauda casi 700.000 euros en la subasta de su colección de guitarras
Pocos saben de su afición, pero Richard Gere, además de actuar, es un importante coleccionista de guitarras desde hace décadas. Ahora, el actor ha decidido deshacerse de ellas, pero por una buena causa. Así anoche consiguió recaudar casi un millón de dólares en la subasta de su colección de un centenar de instrumentos en la sede de Christie's en Nueva York. "Todos los beneficios de la venta serán destinados a causas humanitarias alrededor del mundo", aseguró el protagonista de American Gigolo (1980) y de Oficial y caballero (1982) en un comunicado de la casa de subastas en el que reconoció tener "amor por las guitarras desde que era niño".
A pesar del carácter icónico y el valor que tienen algunos de sus instrumentos, Gere "nunca se vio a sí mismo como un coleccionista, compró una a una las guitarras porque le gustaba cómo sonaban", según dijo a Efe el responsable del departamento musical de la casa de subastas, Kerry Keane. El intérprete "toca muy bien la guitarra, el piano y la trompeta, aunque mucha gente no lo sepa, y las guitarras que se han vendido son el resultado de 40 años de compras", reveló este experto.
El precio más alto de la venta, en la que se recaudaron 936.438 dólares (700.000 euros), se lo llevó una guitarra Gibson Les Paul de 1960, por la que su comprador pagó 98.500 dólares (71.000 euros), un tipo de guitarra que ha estado entre las favoritas de músicos de la talla de Eric Clapton o Keith Richards. "Las guitarras han sido mis verdaderas amigas durante las épocas buenas y las malas, añadió Gere, quien reconoció asimismo que le resulta "un poco doloroso" desprenderse de los instrumentos, elaborados por firmas de referencia en el mundo musical como C.F. Martin, Fender, Gretsch, Epiphone o Gibson.
Algunas de las piezas más codiciadas de la puja estaban precisamente elaboradas por Gibson: Un comprador pagó 74.500 dólares (54.500 euros) por una guitarra eléctrica en forma de V que esta marca fabricó en 1958, y que perteneció al músico Albert King (1923-1992). No fue el único instrumento con un expropietario célebre: otra guitarra Gibson de 1960 que perteneció al músico Peter Tosh (1944-1987), uno de los miembros de The Wailers junto a Bob Marley (1945-1981), se adjudicó por 20.000 dólares (14.635 euros).
Además, una guitarra acústica D-28 de 1931, la primera que la compañía C.F. Martin produjo de esa serie, se vendió por 62.500 dólares (45.700 euros), mientras que una guitarra de tipo "archtop" o de tapa arqueada o tallada, como las que fueron populares entre los músicos de jazz antes de la guitarra eléctrica, alcanzó un precio de martillo de 20.000 dólares.
Este último instrumento fue fabricado en 1935 por el luthier italoamericano John D'Angelico (1905-1964), y Gere la compró directamente de su discípulo, el también prestigioso lutier James D'Aquisto (1935-1995), según reveló la casa de subastas.
Richard Gere, célebre por su interpretación en Pretty Woman (1990), demostró sus dotes musicales además de en esa película que protagonizó junto a Julia Roberts, en la cinta Cotton Club (1984), de Francis Ford Coppola.
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