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Esquerra Republicana se conjura para las municipales

Los independentistas intentarán cohesionarse con un documento estratégico que se votará este sábado

Esquerra Republicana (ERC) quiere recuperarse de la dura caída y aguantar el tipo en las municipales. En plena ebullición interna, el partido busca evitar guerras cainitas y aplazar cualquier discusión sobre el liderazgo de Joan Puigcercós hasta después de las elecciones de mayo. Para ganar tiempo, la dirección del partido ha esbozado un documento que analiza la debacle del 28-N (perdieron más de la mitad de los diputados y fueron relegados a quinta fuerza) y planifica los próximos meses del partido hasta el congreso de octubre de 2011, de donde saldrá la ERC del futuro. Esta hoja de ruta deberá ser aprobada en el Consejo Nacional del sábado, en el que también se someterá a votación el liderazgo de Joan Puigcercós

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El análisis de la derrota incluye una acérrima defensa del tripartito. Con el segundo pacto, que hizo a José Montilla presidente, "ERC acababa de una vez por todas con el fantasma de una posible deriva lerrouxista", se asegura en el documento. Pero también hay reproches: la falta de relato del Gobierno o las desavenencias con PSC e ICV ha hecho perder enteros en ERC. En el capítulo de autocrítica, la crisis interna de 2008, que cuarteó al partido y lo dejó mermado. También se reconoce abiertamente los problemas que ha generado en su estrategia la creación de nuevas plataformas independentistas, culminados en una campaña electoral que señalan como errónea.

Las estrategias de futuro se paran en las municipales, donde los republicanos quieren aguantar el tipo. El objetivo es mantener la cohesión para no perder aún más apoyos. Este sábado se empezará a trabajar: habrá cambios en la Ejecutiva (aunque Puigcercós, salvo sorpresa, seguirá). También se producirá la creación de dos grupos: uno, de análisis, formado por los miembros del partido con experiencia e el Gobierno; otro equipo se dedicará a tejer complicidades con los movimientos sociales.

De cara a los comicios, a partir de enero se pondrá en marcha un plan para ganar apoyos en las grandes ciudades. El documento contempla la posibilidad de crear coaliciones con otras formaciones independentistas. La campaña arrancará en marzo, donde habrá un encuentro de candidatos municipales para cerrar la estrategia y la celebración del 80 aniversario del partido

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