El ex guardaespaldas de Tamayo, condenado por hacerse pasar por agente del CNI

La Audiencia Provincial de Madrid ha condenado a un año y 10 meses de cárcel a José Antonio Expósito, conocido por ser el guardaespaldas de Eduardo Tamayo, diputado regional socialista que impidió que el PSOE se hiciera con el poder en la Comunidad en 2003, al no acudir a votar en la sesión de investidura como presidente de Rafael Simancas. Expósito se hizo pasar entre 2003 y 2005 por agente del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) para conseguir que dos policías, uno destinado en Marbella y otro en Madrid, le facilitaran información sobre otras personas a través de las bases de datos de las Fuerzas de Seguridad. En dichas bases de datos constan el nombre, DNI, NIE o pasaporte, domicilio y órdenes de búsqueda que pesen sobre una persona, las denuncias presentadas por o contra ella, los antecedentes policiales, su situación administrativa en España y su fotografía, así como los datos de sus vehículos.

En una sentencia hecha pública hoy, la Sección Cuarta condena a Expósito a un año de cárcel por un delito de encubrimiento y revelación de secretos con la atenuante muy cualificada de trastorno psíquico; a cuatro meses por un delito de falsificación de documento y a seis meses por usurpación de funciones públicas. La sentencia recoge que Expósito consiguió a través de Internet las imágenes del escudo del CNI, del escudo nacional y del Ministerio de Defensa "con la finalidad de utilizar tales imágenes para crear documentos de similar apariencia a los carnés originales del CNI". Expósito hizo documentos falsos para sí mismo y para, al menos, otras tres personas.

El condenado llegó a exhibir el falso carné ante sus amigos, sus compañeros de trabajo e incluso ante agentes de la Policía, e incluso "regaló gorras, camisetas y chapas con emblemas o distintivos del CNI o relojes con inscripciones grabadas del CNI". Los magistrados consideran que Expósito padecía en estas fechas un trastorno mixto de la personalidad "con perfiles muy marcados de pseudología fantástica y personalidad paranoide" que alteró sus facultades, por lo que le aplica la atenuante de trastorno psíquico. En el juicio, el condenado ha reconocido que se hizo pasar por agente para rodearse de "un halo de misterio" ante sus allegados y compañeros. "Lo hacía con la simple, llana y tonta intención de sentirme importante y destapar mi propio ego", declaró en el juicio Expósito. "Me sentía bien si la gente me alababa".

Aunque el tribunal absuelve a los dos policías, ya que el fiscal retiró la acusación contra ellos por estimar que actuaron en la creencia de que Expósito era realmente un agente del CNI, la sentencia recoge que "no actuaron con toda la diligencia que les era exigible", ya que no informaron a sus superiores de lo que estaban haciendo.

Expósito fue la persona que escoltó a Tamayo a un hotel mientras tendría que estar acudiendo al pleno de investidura de Simancas, lo que llevó a una nueva convocatoria de elecciones y la victoria del PP y Esperanza Aguirre.